Para ignorar las demandas de los trabajadores, y no atenderlas debidamente, el régimen de Nicolás Maduro aplica la estrategia de empujarlos hacia la informalización, de acuerdo con la denuncia formulada por Thaís López, coordinadora del Observatorio de Conflictividad Laboral y Gestión Sindical del Inaesin.
Las condiciones desfavorables para el correcto desempeño de las actividades laborales siguen presentes en Venezuela, donde los trabajadores se mantienen en pie de lucha para recobrar la calidad de vida perdida durante los últimos años.
López señala que “el gobierno encontró en la informalidad de la economía, una forma para que los trabajadores se hagan de los ingresos que el Estado les niega, al no cumplir con sus compromisos laborales”.
“Para compensar las múltiples carencias los trabajadores, principalmente del sector público, han abandonado sus labores para dedicarse a diversas actividades informales que les permitan mejores ingresos para medio vivir, ya que la destrucción del bolívar y la hiperinflación ha llevado a buena parte de la población a la miseria”, indica López.
A pesar de las limitaciones que impone la pandemia de COVID-19 a la movilidad, los trabajadores no han cesado en su empeño de manifestarse en contra de las políticas del régimen que vulneran sus derechos más básicos y se expresan de diversas maneras.