Un gran vacío en el mundo intelectual, académico y educativo constituye el sensible fallecimiento del doctor Guillermo Morón, ocurrido este viernes 19 de noviembre, a la edad de 95 años, coincidieron en afirmar los doctores Elías Pino Iturrieta, Reinaldo Rojas y Rafael Arráiz Lucca, todos académicos, consultados por Elimpulso.com.
Nacido el 8 de febrero de 1926 en Carora, muy pequeño fue llevado por su familia a Cuicas, estado Trujillo, y ese fue motivo de que todavía se le considerara como trujillano. Pero, siempre profesó el más sublime sentimiento por la tierra y población caroreña.
El mayor historiador
El doctor Elías Pino Iturrieta, individuo de número de la Academia de Historia, director del Instituto de Investigación Histórica de la Universidad Andrés Bello, autor de un País archipiélago, El divino Bolívar, Ideas y mentalidades de Venezuela, entre otras obras, aseveró que Morón fue el mayor historiador de Venezuela en el siglo 20.
Destacó, además, como gerente en los tres o cuatro períodos que tuvo en la Academia Nacional de la Historia. Durante su gestión como editor cumplió tan extraordinaria labor que nunca antes y después se ha visto en la edición de obras históricas, no sólo en Venezuela, sino entre todas las Academias de Historia del continente y de España.
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Hizo de la investigación una actividad intensa, que agrandó la labor de la Academia y le dio enorme prestigio a la institución. De igual forma, hay que admirar su labor literaria exteriorizada en ensayos, novelas y relatos.
Sus libros fueron textos de estudio para miles y miles de estudiantes en Venezuela. Y sobre todo fue un gran humanista, sentenció el doctor Pino Iturrieta.
Un gran venezolano
El doctor Reinaldo Rojas, igualmente miembro de número de la Academia de Historia de Venezuela, docente universitario, investigador y galardonado con premios como el de Historia Francisco González Guzmán y el Continental de Historia Colonial de América “Silvio Zavala”, muy conmovido por la infausta noticia del fallecimiento del doctor Morón, manifestó de inmediato que el ilustre intelectual fue sobre todo un gran venezolano, reconocido historiador y admirado académico.
Su prestigio en la actividad de la historia fue más allá del territorio nacional al punto de haber sido el coordinador de la Gran Historia de América, que fue publicada en 30 volúmenes.
Además de haber escrito numerosas obras de historia, incursionó en la literatura, fue profesor universitario y columnista del diario impreso El Impulso.
El doctor Morón, nacido en Carora y llevado muy pequeño a Cuicas por su familia, al cumplir los 70 años decidió retirarse de la vida pública y dedicarse a la literatura y por último a escribir sus memorias.
Su deceso nos ha causado gran consternación y un profundo sentimiento, porque se nos ha ido un gran hombre, un larense de enorme trayectoria y un ser humanista admirable.
El doctor Rafael Arráiz Lucca, miembro de la Academia Venezolana de la Lengua, historiador, poeta, ensayista y quien fuera director del Centro de Estudios Literarios Arturo Uslara Pietri de la Universidad Metropolitana, director general del Consejo Nacional de la Cultura, expresó que el doctor Morón fue un historiador sumamente importante en Venezuela.
Generaciones de venezolanos estudiaron con sus manuales de historia, prosiguió. Además, hay una característica de sus ideas que lo distinguen muy particularmente: mientras, prácticamente, todos sus compañeros profesionales eran marxistas, él nunca militó en las filas del marxismo.
Además, tuvo una actuación política destacada en la candidatura de Pedro Tinoco, en el año 1973, de la cual fue coordinador. Aparte de su obra como historiador, hay una obra literaria como ensayista y novelista que también merece valoración.
Y en la Academia Nacional de la Historia, durante los años en fue director, su programa de publicaciones fue sumamente intenso y dejó en ese sentido una obra editorial importante.
Fue un hombre con realizaciones varias en el orden de la historia, del humanismo, del periodismo. Lamento profundamente su muerte acaecida a los 95 años. Su longeva existencia fue muy útil y su trayectoria y obras también fueron extensas. Y su recuerdo será perdurable.
