Macario González fue el primero en romper con los triunfos del bipartidismo AD – Copei en las elecciones efectuadas el 3 de diciembre de 1995. Era el abanderado del partido Movimiento Al Socialismo principalmente y asumió como el tercer alcalde de Barquisimeto escogido por elección popular.
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Macario inicia un nuevo modelo de gestión con obras de más envergadura que sus dos últimos antecesores, entre ellas la Plaza de la Justicia del frente al Edificio Nacional y la recuperación de la Casa de Eustoquio Gómez.
Igualmente es recordado por obras de mejoramiento vial, entre ellas la demolición del obsoleto elevado de Pata e’ Palo y ampliación de la avenida Libertador en ese sector. También transformó el viejo mercado Altagracia en un Palacio Buhoneril, con lo cual se daba solución al problema de la economía informal en aquel entonces.
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Denuncias y escándalos no fueron ajenos a la gestión del alcalde Macario González, cuyos detractores políticos siempre estaban muy pendientes de sus movimientos. De esos altibajos, el más relevante fue el homicidio del chófer del alcalde González a manos del hampa en horas de la madrugada en un centro nocturno el 27 de septiembre de 1997 mientras lo esperaba frente a un local nocturno.
Aquella acción habría afectado considerablemente la imagen del alcalde, indicaron analistas políticos en aquel momento. Macario González va a la reelección en el año 2000, luego de la nueva Reforma Constitucional de 1999 que alargaba el período a cuatro años, y pierde la magistratura municipal ante el candidato del MVR, Henri Falcón, quien dará inicio al chavismo en la gerencia municipal que se extendió durante varios años.
