Al menos 7 de cada 10 escuelas públicas en el país tienen fallas con el servicio de agua potable, aseguró la profesora Belkis Bolívar, dirigente nacional de la Federación Venezolana de Maestros.
“El agua es uno de los requisitos indispensables para llevar a cabo las medidas de bioseguridad, sin esto es imposible. Además, las conexiones eléctricas están dañadas debido a los apagones que han ocurrido”, indicó la docente.
Seguidamente, aseguró que el programa “Una gota de amor” ha sido superficial ya que los planteles no han recibido la atención debida. “Si no se tienen las condiciones para dar clases, no se puede recibir a los estudiantes”, reiteró Bolívar.
Por otra parte, Raquel Figueroa, dirigente sindical del Colegio de Profesores de Venezuela, indicó que debido a la baja remuneración del personal docente y administrativo, la educación en el país se encuentra en decadencia ante la deserción de miles de profesores.
“Hay 65% de déficit de docentes, distribuidos en diversas áreas del conocimiento. El sector que tiene mayor precariedad es la educación primaria”, dijo Figueroa.