Representar a tu país en los Juegos Olímpicos es uno de los sueños más grandes para cualquier atleta del mundo. Para llegar a ello, cada deportista debe invertir años de su vida en entrenamientos, crecimiento, emociones y decisiones. No es un camino fácil, pero miles de atletas han demostrado que es posible; incluso, otros tantos, han alcanzado una meta mucho más grande: ganar una medalla olímpica.
Ahora bien, al contextualizar e imaginar todo lo que representa para un atleta poder llegar a los Juegos Olímpicos, y más aún, lograr conquistar una presea olímpica, es mucho más probable entender la connotación de una noticia lamentable que se generó recientemente en Argentina: Sofía Maccari, integrante del seleccionado argentino femenino de hockey sobre césped, quien ganó una medalla de plata en los Juegos Olímpicos Tokio 2020, fue asaltada en Escobar, Argentina, y los delincuentes le robaron su histórica -y preciada- presea olímpica.
“Me asaltaron dos hombres armados en Escobar. Me robaron el auto, el celular y lo más doloroso, la medalla olímpica”, escribió inmediatamente Maccari en sus redes sociales. Seguidamente, añadió: «No puedo explicar el dolor que esto significa. Les pido colaboración a todos«.
Tras el hecho, la policía desplegó un operativo cerrojo para dar con los asaltantes y, en ese marco, inició la persecución del vehículo, que luego fue abandonado por los delincuentes, que continuaron con la fuga a pie.
Hasta el momento, los operativos continúan y la atleta argentina sigue enviando mensajes a través de sus redes sociales con la esperanza de que los involucrados se solidaricen y devuelvan la medalla olímpica.
