Es obligatorio comenzar por el principio… ¡El recate de las fuentes hídricas!
Encomendado en una comisión nombrada en la Red para estudiar los problemas del agua, de lo cual tenía que rendir un informe, y tratando de cumplir con el deber establecido, he intentado sintetizar la gravísima problemática, que atañe a “todos” los seres vivos y qué, a mi entender tiene su génesis en la inmensa degradación en la cual podemos caer los seres humanos al tratar de preservar la vida, demostrado así, que estamos en la cúspide de la pirámide formada por conocidas bestias depredadoras.
Supongo, que es lamentablemente real, la constante y continua desidia ejercida por el estamento político a través de los años pues, a pesar de haber sido redactada una Constitución Nacional que fue aprobada por el pueblo y que ha sido catalogada como una de las mejores y más modernas del mundo, que expresa tres artículos protectores del ambiente, y de haber sido creadas siete leyes dedicadas a su preservación, el Estamento Legal protector y preservador del ambiente, pareciera haber caído en lo que el vulgo califica como:
“LETRA MUERTA.”
Entre los bienes materiales que Dios otorgó a esta “Tierra de Gracia”, llamada Venezuela, estaban los llanos, plagados de inmensos bosques formados por maderas preciosas, como son el cedro y la caoba, entre muchas otras especies y, estos bosques, estaban poblados por una fauna exuberante donde personas inconscientes practicaban el aberrante deporte de la cacería, y así acabaron con grandes manadas de animales característicos de la zona como venados, tigres y cunaguaros, por citar algunos. Infinidad de variedades de aves fueron diezmadas, las cazaban vivas y las vendían al exterior. Durante la época de la Colonia, Venezuela se identificó como uno de los países exportadores de “Plumas de Garzas.”
Esta innegable depredación acabó con un equilibrio ecológico histórico en nuestra nación, más aún la situación fue agravada por las hachas utilizadas en la tala, y por la quema que arrasaron plantas que no les eran útiles y exterminó las especies animales autóctonas.
Árboles milenarios de gran tamaño fueron substituidos por pastos de baja altura y las aves polinizadoras que dispersaban la vegetación fueron substituidas por ganado, especialmente, vacuno, que se dice es productor de CO2, que destruye la capa de Ozono.
Pero, esto es resultado de la civilización, de la búsqueda de la expansión agropecuaria en la consecución de los alimentos que necesita la población para su subsistencia, pensando, solamente, en el hoy, sin prever:
¿Qué vamos a dejar a nuestra descendencia?
La mayor parte del territorio larense es semi-árido y sus zonas montañosas, han sido depredadas continuamente e intensificándose durante los últimos veintidós años de manera incontrolada, como consecuencia de un sistema político-económico, que según mi criterio es desfasado y fracasado, situación que se puede comprobar en los países donde se ha tratado de imponer, y en Venezuela acabó con un sistema productivo, auto sustentable, que llevó al país a la cúspide del mundo cuando fue reconocido como el primer exportador de café del globo terráqueo, por su calidad, y el segundo por la cantidad de café exportada, y cuyos integrantes, por ser preservadores de su hábitat natural, eran denominados:
“Guardianes Gratuitos del ambiente.”
Zonas decretadas como Áreas de Protección Especial y/o Parques Nacionales, están siendo depredadas flagrantemente, ante las autoridades a quienes compete cumplir con el deber aceptado y a veces actúan con abuso del poder que les ordena cumplir con ese deber. Como ejemplo podemos citar al “Parque Nacional Terepaima”, solamente, por ser guardián de vida de las ciudades de Barquisimeto y de Cabudare.
Pero lo más grave ocurre en la Sierra de Portuguesa, donde se encuentran las nacientes de agua dulce que nutren al ochenta y cinco por ciento de la población larense y surten los riegos en las fincas de Portuguesa, afectando a la Orinoquía, así como también a la Cuenca del Mar Caribe y la del Lago de Maracaibo.
Es un llamado a reflexión, para que, utilizando la lógica y la razón, se conforme un equipo multidisciplinario que comience a actuar con sensatez obviando la retórica y tomando acciones inmediatas, eficaces y eficientes que conlleven a la reforestación, al fomento, protección y preservación de los bosques proveedores de agua dulce y más allá, de… oxígeno.
Maximiliano Pérez Apóstol
