En Venezuela, un total de 960 personas están a la espera de un trasplante, debido a que hace más de cuatro años este programa está paralizado, denunció este martes la diputada por Voluntad Popular del legítimo Parlamento, Karin Salanova.
Precisó que, del total de ciudadanos que aguardan por esta intervención, 150 son niños. “En 2021, han fallecido 15 menores de edad. Y desde que se detuvo el programa, 46 infantes murieron”, lamentó la legisladora de la tolda naranja durante un punto de información que solicitó en la sesión de la Comisión Delegada de este 24 de agosto.
Salanova sostuvo que el clamor de las familias de los pacientes y de los diputados de la Asamblea Nacional es para que se garantice la vida y salud a los niños.
“No podemos seguir con esta angustia y espera para una persona que cada día necesita un trasplante o un medicamento. Es una sentencia de muerte. No queremos seguir contando cifras de fallecidos, queremos cantar victoria”, aseguró.
La parlamentaria alzó su voz desde el Poder Legislativo para que el procedimiento de trasplantes se vuelva a activar en el país. Aclaró que no hay cifras claras, a excepción de las que denuncian desde el J.M. de los Ríos. “Hay gente que se complica o no tiene los recursos para dializarse en una clínica y los equipos en los hospitales están dañados”, expresó.
Venezuela atraviesa una crisis sin precedentes que ha agudizado la emergencia sanitaria. Los pacientes con enfermedades crónicas han visto comprometida su salud y, en el peor de los casos, han perdido la vida. Todo esto ocurre bajo la mirada indolente del régimen que no atiende las necesidades del pueblo, excusándose en las sanciones que parte de la comunidad internacional ha aplicado a funcionarios quienes han violado los derechos humanos en el país, señaló la legisladora.