“DECLARACIÓN DE LA ORGANIZACIÓN DE LAS NACIONES UNIDAS (ONU).
SOBRE LOS DERECHOS DE LOS CAMPESINOS
Y DE OTRAS PERSONAS QUE TRABAJAN EN LAS ZONAS RURALES.”
Transcribo parte de las reafirmaciones hechas en el texto de la Declaración, cito:
Además, que todos los derechos humanos son universales e indivisibles, están relacionados entre sí, son interdependientes y se refuerzan mutuamente, y que todos deben tratarse de manera justa y equitativa, en condiciones de igualdad y asignándoles la misma importancia, y recordando que la promoción y protección de una categoría de derechos nunca debe eximir a los Estados de la promoción y protección de los demás derechos. Reconociendo la especial relación e interacción de los campesinos y otras personas que trabajan en las zonas rurales con la tierra, el agua y la naturaleza a las que están vinculados y de las que dependen para su subsistencia….Preocupado porque los campesinos y otras personas que trabajan en las zonas rurales sufren de manera desproporcionada pobreza, hambre y malnutrición. Preocupado también porque los campesinos y otras personas que trabajan en las zonas rurales sufren las cargas causadas por la degradación del medio ambiente y el cambio climático. Preocupado además por el envejecimiento de los campesinos en todo el mundo y porque los jóvenes cada vez más emigran a las zonas urbanas y dan la espalda a la agricultura debido a la falta de incentivos y a la dureza de la vida rural, y reconociendo la necesidad de potenciar la diversificación económica de las zonas rurales y la creación de oportunidades no agrícolas, especialmente para los jóvenes de las zonas rurales. Alarmado también por el gran número de casos de suicidio de campesinos en varios países. Destacando también la importancia de la promoción y la protección de los derechos del niño en las zonas rurales, en particular mediante la erradicación de la pobreza, el hambre y la malnutrición, la promoción de una educación y una salud de calidad, la protección contra la exposición a los productos químicos y los desechos y la eliminación del trabajo infantil, de conformidad con las obligaciones pertinentes en materia de derechos humanos. Convencido de que los campesinos y otras personas que trabajan en las zonas rurales deben recibir apoyo a su labor de promoción y empleo de prácticas de producción agrícola sostenibles que beneficien a la naturaleza, denominada también Madre Tierra en varios países y regiones, y estén en armonía con ella, en particular respetando la capacidad biológica y natural de los ecosistemas para adaptarse y regenerarse mediante los procesos y ciclos naturales. Tomando en consideración las condiciones peligrosas y de explotación en las que tienen que trabajar en muchas partes del mundo muchos campesinos y otras personas que trabajan en las zonas rurales, a quienes se niega a menudo la oportunidad de ejercer sus derechos fundamentales en el trabajo, y que carecen de un salario mínimo vital y de protección social. Preocupado porque las personas, los grupos y las instituciones que promueven y protegen los derechos humanos de quienes se ocupan de cuestiones relacionadas con la tierra y los recursos naturales corren un gran riesgo de ser víctimas de diferentes formas de intimidación y de que se atente contra su integridad física…
Estimando que Venezuela suscribió la declaración conjuntamente con países que dicen ser defensores de los proletarios y de los más desprotegidos, tome esta parte del Pre-ambulo de la declaración para invitarles a comparar la situación en la cual sobreviven los productores agropecuarios venezolanos y reflexionar sobre ella. Puedo sugerir que como ejemplo fehaciente podemos seleccionar a las humildes familias caficultoras que están siendo exterminadas en el país que ocupó el primer lugar en el mundo por la calidad de café que producía y alcanzó el segundo lugar por la cantidad de café que exportaba.
Desde el mismo momento en que comenzó el cambio político-económico impuesto en el país, a través de la “Asociación Nacional Caficultores de Venezuela” y luego, a través de la “Federación nacional Caficultores de Venezuela”, hemos denunciado, en partes médicos las enfermedades endémicas, las parasitosis, lumbalgias, desnutrición de los niños y adultos y, hasta los suicidios cometidos por caficultores ingiriendo Gramóxone y/o ahorcándose. Situación que tiene su génesis en los precios viles impuesto al trabajo, esfuerzo, tesón, perseverancia e inversión de humildes familias que viven en ranchos con paredes de bahareque, piso de tierra, cocina de leña, sin electricidad y sin letrinas.
¿Derechos Humanos?
Continuará…
Maximiliano Pérez Apóstol