James Spears, padre de Britney, renunció voluntariamente a la tutela legal de su hija, informaron medios internacionales este jueves.
Por lo tanto, luego de 13 años, la princesa del pop volverá a tener el control sobre su vida y asuntos legales.
La abogada del padre de la artista confirmó, en unos documentos entregados a la Corte Superior de Los Ángeles, que está de acuerdo con delegar esa función a otra persona, lo que no anularía la tutela de Britney pero lo dejaría fuera de la misma junto a su familia.
“Sin embargo, aun cuando el señor Spears es el blanco incesante de ataques injustificados, no cree que una batalla pública con su hija por su servicio como tutor sea lo mejor para ella”, se lee en el comunicado difundido por el diario TMZ.