Las principales calles y avenidas de Barquisimeto, permanecen afectadas por la proliferación de cloacas, que en algunos casos persisten desde hace años, sin lograr una atención efectiva por parte de Hidrolara y las autoridades locales y regionales.
Los brotes de aguas blancas y negras, se han convertido en verdaderos focos de contaminación, afectando la infraestructura y la salud de quienes viven o trabajan cerca de ellas.
Avenida Venezuela con calle 10
Un brote de aguas negras se presenta desde hace varios meses en la avenida Venezuela con calle 10 de la ciudad. El líquido que de allí emana, recorre al menos 3 cuadras, afectado a comerciantes que laboran en la zona y a transeúntes que deben soportar el mal olor y evitar no ser salpicados por los vehículos que por allí transitan.
Se desconocen las gestiones de Hidrolara, sobre este brote que surgió en pleno canal lento del sentido oeste-este, de la transitada arteria vial.
Avenida Venezuela con avenida Urdaneta
Otro brote, que se presenta desde hace más de dos años, es el ubicado en la avenida Venezuela con avenida Urdaneta, adyacente al monumento Flor de Venezuela.
La pestilencia es la compañera diaria de comerciantes que han reportado la problemática en innumerables ocasiones, sin recibir soluciones por parte del ente encargado.
Las aguas putrefactas recorren aproximadamente dos cuadras y el mal olor arrecia en determinadas horas del día, cuando la temperatura es más fuerte. Esta situación mantiene en riesgo la salud de quienes en esa zona confluyen.
Avenida Libertador con calle 37
También, vecinos de la urbanización Antonio José de Sucre reportaron la proliferación de aguas servidas en la zona, lo cual ha afectado directamente a algunos apartamentos de los bloques que colindan con la calle 37.
La situación ha afectado también el pavimento de la transitada vía, originando un potencial foco contaminante en la zona, que pone en riesgo la salud de los vecinos.
Ya el problema fue expuesto ante Hidrolara, institución de la cual esperan aún respuestas.
