Este domingo, la iglesia católica larense y venezolana, lloran la partida de un gran hombre que por mas de 50 años sirvió al pueblo de Dios. Monseñor Antonio José López Castillo, falleció este domingo a la edad de 76 años, tras un Accidente Cerebro Vascular.
Nació el 9 de julio de 1945 en El Moján, estado Zulia. Desde joven se arraigó en su vocación sacerdotal, recibiendo su ordenación en 1970 e iniciando su recorrido sacerdotal en Maracaibo.
Tras sus amplios estudios, entre los que destacan su carrera de Filosofía, Fue asignado a la Arquidiócesis de Maracaibo, donde cumplió responsabilidades como sub-vicario y vicario general. Después fue párroco, profesor de teología en el Seminario de Maracaibo, juez eclesiástico y director del diario La Columna, de la capital zuliana.
El papa Juan Pablo II, en 1988, lo nombró obispo auxiliar de Maracaibo. En 1992, obispo de Barinas.
En el 2001 Arzobispo de Calabozo Y el 22 de diciembre de 2007, Arzobispo de Barquisimeto, asumiendo el cargo el 16 de febrero de 2008 hasta marzo de 2020.
Durante sus 13 años frente a la iglesia larense, Monseñor López se caracterizó por acompañar la feligresía y denunciar los problemas que agobian al rebaño de Dios.
Desde Elimpulso.com, casa editora a la que fue muy cercano y con la que mantuvo un permanente trabajo evangelizador por medio de la página arquidiocesana, expresamos nuestras más sinceras condolencias a los familiares, amigos y al pueblo católico, que hoy lamenta la muerte de un hombre que, con su celo pastoral y el deseo de llegar a los alejados con su voz profética, defendió siempre los derechos de los más desfavorecidos, anunciando el Evangelio y denunciando todo aquello que lo contradice en nuestros tiempos.