«Conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.»
Juan 8:32
La gesta histórica recién celebrada en el país relacionada con la independencia y la libertad nos recuerda cómo este término ha sido manoseado y manipulado según los intereses políticos ideológicos de los hombres en el poder. No podemos negar que, a lo largo de la historia del planeta, este término ha sido determinante en la vida de la humanidad. Siendo motivo para justificar la confrontación, la violencia y la muerte entre los hombres. Cada actor lo acomoda a su manera y se lo explica a los suyos como más le conviene, para así lograr un objetivo personal u electoral. Y lo que preocupa es que el cristiano a conciencia o no, se ha plegado a alguna de las tendencias ideológicas olvidando el significado bíblico que tiene este término para nosotros. Siempre anda detrás de esperanzas falsas, por lo cual sobrevendrá frustraciones verdaderas.
Al final, se ha demostrado, que en este mundo no hay libertad. Nadie va a negar que la conciencia del hombre está cercada de manera determinante por un caudal de información que no informa, sino que forma opinión. Sucedió con los judíos, quienes fueron escogidos para anunciar y mostrar el poder y la salvación venida de Dios, pero no lo hicieron. Hoy, sucede igual con los cristianos contemporáneos. “Muchas de las verdades concernientes a la religión de Jehová habían sido oscurecidas por las innovaciones de los judíos. La mente del pueblo estaba cegada, y un velo cubría su corazón cuando leía el Antiguo Testamento. Estaban atados por las pesadas tradiciones de los ancianos y por sus pecados” Dicc. Bíbl. Adv. En la actualidad el poder de las iglesias a través de la pomposidad y el verbo de sus líderes hacen lo mismo. Obvian la Palabra y encauzan erróneamente al creyente.
Mis apreciados, la libertad fuera de Dios y su Palabra no existe. Así lo hemos aprendido y así debemos enseñarlo, por cuanto así viene explicado por él mismo en el Manual Divino. El hombre lejos de Dios no le ha quedado otra alternativa que drenar sus necesidades conceptuales en estas categorías históricas. Siempre fundamentadas en ideologías, filosofías, tradiciones y especulaciones, que a la final de nada le sirven, por cuanto
permanentemente arrastrarán un vacío que le acompañará hasta la muerte. ¡Libertad, libertad, libertad! Grita hoy la gente de ambas tendencias políticas en las calles y el cristiano se une.
Jesús vino para darnos la verdadera libertad, no la que los políticos venden y la andamos comprando. ¡No! Jesús “Declaró que su ministerio era «pregonar libertad a los cautivos” “El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ungió para dar buenas nuevas a los pobres, me envió a sanar a los quebrantados de corazón, a pregonar a los cautivos libertad, y a los ciegos vista; a dar libertad a los oprimidos” Lucas 4: 18. Y prometió libertad a los que aceptaban la verdad. “Porque el Señor es el Espíritu, y donde está el Espíritu del Señor, hay libertad. 2 corintios 3: 17.
Al final, nos hace un dramático llamado a mantenernos libres, pero del pecado, que es el que nos esclaviza verdaderamente, y que ayudemos para liberar a otros. “Manteneos, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos libertó, y no os dejéis oprimir de nuevo bajo el yugo de la esclavitud” Gálatas 5: 1. ¿Cómo les parece?
¡Hasta la semana que viene por la WEB Dios mediante!
William Amaro Gutiérrez