El ministro de petroleo designado por el régimen de Nicolás Maduro, Tareck El Aissami, afirmó en una entrevista para Bloomberg, que las refinerías del país tienen como objetivo producir el 100% de la demanda nacional de combustible para fines de junio, procesando alrededor de 500.000 barriles de crudo al día, por lo que poco después las colas en las estaciones de servicio «desaparecerán».
“La producción puede llegar hasta los 600.000 barriles diarios si todo va bien y no se aumentan las sanciones”, dijo el funcionario sancionado por Estados Unidos.
De igual forma, El Aissami admitió que ha mermado la operatividad de la industria petrolera en Venezuela, en la gestión de Nicolás Maduro, “La capacidad de producción ha estado cayendo desde 2014 y no ha habido plataformas petroleras operando en Venezuela durante un año”.
Aunque la producción ya había caído cuando Maduro sucedió a Hugo Chávez como presidente en 2013, comenzó a desplomarse una vez que Estados Unidos impuso sanciones a la estatal Petróleos de Venezuela SA, o PDVSA, en 2017. La producción tocó fondo en unos 310.000 barriles en agosto de 2020, acabando con casi todos los ingresos por exportaciones del país, reseñó Bloomberg.
Finalmente, destacó el ministro que confía en que todo será olvidado porque hay mucho dinero por hacer reconstruyendo la industria petrolera de Venezuela. Asimismo, aseguró que hay clientes listos para el crudo pesado de la Faja del Orinoco del país en las refinerías de Texas y Luisiana, en Estados Unidos.