En un plazo de 60 días, la Comisión Especial para la reestructuración del sistema de justicia, creada por la administración de Nicolás Maduro, deberá solucionar el hacinamiento y retardo procesal en centros de prisión preventiva del país.
La información la dio a conocer Maduro, al anunciar una “revolución profunda y acelerada del sistema de justicia” que estará dirigida por los diputados de la Asamblea Nacional electa en 2020, Diosdado Cabello y Cilia Flores, en calidad de presidente y vicepresidenta, así como por la presidenta de la Sala Constitucional del TSJ, Lourdes Suárez Anderson.
“Esta Comisión va tomar las riendas de una revolución completa del sistema de justicia, que va integrar todos los órganos. En las próximas horas estaremos anunciando su conformación completa, una comisión que tiene que rendirle cuentas al Consejo de Estado”, enfatizó desde el Palacio de Miraflores.
Precisó que la Comisión Especial tendrá la potestad de presentar –en el menor lapso posible- un plan especial para la transformación estructural del sistema de justicia a través de reformas y nuevas leyes.
Indicó que en la configuración de nuevas legislaciones, el Parlamento Nacional electo en 2020, tendrá «un rol protagónico», dado “que ya tiene en su portafolio, un conjunto de leyes que fueron discutidas para impulsar estos cambios necesarios del sistema de justicia del país”.
“Vamos a cambios estructurales profundos con una idea muy clara: la justicia gratuita, directa, pública, equilibrada, ajustada a la Constitución y que produzca el mayor nivel de seguridad jurídica, social y humana; de estabilidad y paz para el país”, aseveró Maduro.