Es un gran reto para los líderes de las organizaciones, mantener y hacer sostenible la continuidad del negocio. En este momento de adaptación y grandes cambios sociales y normativos por el que transita el mundo, entre los principales elementos que se deben considerar en el área laboral, está construir ecuaciones salariales competitivas, que permitan mantener a los talentos comprometidos y productivos.
Según la encuesta realizada por Mercer Marsh, en donde participaron 601 compañías de Latinoamérica, incluidas del sector privado de Venezuela en distintos rubros, se evidenció que el 61% de las empresas participantes no han realizado cambios en el presupuesto de bonificaciones salariales durante la pandemia.
En el ámbito de educación y entretenimiento el 40% de los encuestados afirman que otorgan un bono educativo a sus colaboradores y el 95% piensa mantenerlo de forma indefinida. Además, el 40 % ofrece un bono/subsidio de movilización y transporte; y el 10 % de los que no dan el beneficio, piensan implementarlo en los próximos 6 meses.
Otro de los resultados a resaltar es que el 81% de las organizaciones tiene pensado mantener bonos y subsidios por medicamentos a cada talento. Sumado a ello, el 80% de los empleadores participantes tiene pensado mantener un programa de asistencia a los empleados.
Sodexo se adapta a la nueva normalidad digital y crea nuevos productos que vienen a engrosar su ya sólido portafolio, los cuales son para contribuir a mejorar la gestión de estrategias salariales. “Desde la experiencia que hemos tenido durante los últimos 29 años, ponemos a disposición del mercado venezolano, las mejores prácticas, datos y contenidos de tendencia mundial, así como normativas de retención del talento, que se pueden aplicar en el país”, indicó Luis Montero Gerente General de Sodexo Venezuela.
Para nosotros, recalca Montero, es importante que los líderes de las organizaciones se sientan seguros y confiados de proteger y retener al talento humano de sus empresas. Es por ello, que bonificar a través de una buena estrategia salarial basada en beneficios e incentivos debidamente administrados con empresas certificadas mitiga ese riesgo de deserción, que tiene como consecuencia más dinero, tiempo, alta rotación de talento y mala reputación a sus marcas.