La luz es un efecto producido por la acción de la energía en la masa de las partículas gaseosas que constituyen la atmósfera. La energía es un recurso invisible que casi siempre se ignora y por la supervaloración del efecto de la luz, este prevalece mientras se obvia a la energía. Pero sin la energía no puede haber luz, con la energía se produce luz que es como ya se dijo el efecto. Sólo con la energía se produce el milagro de la luz. Pero la luz se ha apropiado de la velocidad de la energía que es de 300.000 km/s. De modo que se ha generalizado que la velocidad de la luz es de 300.000 km/s. Se aprecia que la velocidad de la energía se le atribuye a la luz que es un efecto. Los científicos al atribuir la velocidad de la energía a la luz, incurren en un error. Se ha llegado a generalizar que la velocidad de la luz es una velocidad que ningún cuerpo puede alcanzar.
Tiene que haber masa para que la energía la convierta en luz. Es masa el filamento del bombillo, el gas contenido en el fluorescente, las partículas de masa gaseosa de la atmósfera. La energía eléctrica traduce en luz el filamento del bombillo y el gas contenido en el fluorescente; la energía solar convierte en luz las partículas gaseosas de la atmósfera para iluminar los días de la Tierra. De tal manera que, la iluminación que conocemos, tanto de los días como la del bombillo y la del fluorescente se fundamentan en la intervención de una masa por la energía.
El espacio del universo es oscuro, porque en él, fuera de los planetas y las estrellas, no se dan las condiciones de masa y de energía requeridas para que se genere la luz, el espacio es ingrávido y la energía contenida es neutra; es decir, carece de las fuerzas positivas y negativas de la energía polarizada; estas son las razones que no permiten que el espacio pueda iluminarse. De aquí, la eterna oscuridad del espacio.
Carlos Mujica
@carlosmujica928