Los instrumentos para la recolección de datos se desarrollan como parte del diseño de investigación total de un estudio, con la finalidad de sistematizar la recopilación de datos, y garantizar a todos los participantes se les formulen las mismas preguntas y en mismo orden. Los instrumentos para la recolección incluyen los cuestionarios estadísticos, estos suelen evaluarse de antemano y “depurarse” para garantizar la validez y confiabilidad del estudio de investigación. Se dice que el estudio tiene validez si, en efecto, permite recabar los datos adecuados que se requieren para contestar las preguntas o alcanzar los objetivos planteados de la investigación de mercados; la confiabilidad señala que las mismas preguntas formuladas en una muestra similar generan los mismos resultados.
Cuestionario estadístico.
Para la investigación cuantitativa, el instrumento fundamental de recolección de datos es el cuestionario, el cual puede enviarse por medios electrónicos o administrarse usando encuestadores de campo. Con la finalidad de motivar a los participantes a que inviertan el tiempo necesario para responder las encuestas, el cuestionario debe ser: interesante, objetivo, libre de ambigüedades, fáciles de llenar y por lo general no deben estar sobrecargados. Para mejorar el análisis y facilitar la clasificación de las respuestas en categorías significativas, los cuestionarios pueden incluir preguntas abiertas, cerradas, filtros y demográficas; en relación a las preguntas abiertas estas generan información más valiosa pero son más difíciles de analizar y codificar; mientras que en las preguntas cerradas el entrevistado elige la opción que se ajuste más a su criterio.
Para redactar las preguntas en un cuestionario estadístico, es importante verificar previamente los objetivos de la investigación; la redacción de las preguntas en un cuestionario estadístico representa el mayor desafío; entre algunas de las recomendaciones que se deben seguir al redactar un instrumento de recolección de datos o cuestionario están: las preguntas deben ser claras, evitar preguntas guiadas, se deben utilizar palabras que el encuestado empleen cotidianamente.
Otro aspecto que debe tener en consideración al redactar las preguntas es tomar en cuenta el orden en que estas se formulan: las preguntas iniciales deben ser lo bastante interesantes como para “motivar” al entrevistado a contestar; después debe seguir un orden lógico. Las preguntas demográficas, por lo general, deben estar al final del cuestionario estadístico; por último es importante resaltar que el formato del instrumento de recolección de datos; así como la redacción y secuencia de las preguntas, afectan la validez de las respuestas.
Msc. Julio Cesar Vargas
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