Desde hace varios meses, surtir gasolina en Venezuela se convirtió en un sufrimiento para los ciudadanos. Madrugar, exponerse y dejar de cumplir con sus actividades regulares, son algunas de las cosas que les sucede a los usuarios al momento de intentar llenar el tanque de sus vehículos.
El combustible en las estaciones subsidiadas tarda en llegar, y ante la necesidad de trabajar y tener sus vehículos operativos, muchos ciudadanos hacen el esfuerzo de reunir dinero para pagar la gasolina en divisas en las bombas «premium» del país.
Sin embargo, pagar la gasolina a 0.50 dólares por litro no es sinónimo de surtir combustible rápidamente. En estas estaciones de servicio también se evidencian largas golas de vehículos a la espera de llenar el tanque, lo que termina representando una inversión monetaria y de tiempo; esto último, una variable que no se recupera.
Las estaciones de servicio premium al este de Barquisimeto suelen estar operativas casi que todos los días a la semana, y por consiguiente, allí se observan largas colas de vehículos que esperan para llenar el tanque con el combustible. Ante esto, los barquisimetanos tardan al menos 3 horas para surtir gasolina en estas bombas.
Por ende, los usuarios intentan programar sus actividades diarias moldeándose a la necesidad de surtir combustible, ya que cuando deben hacerlo, se les hace básicamente imposible cumplir con el resto de sus tareas.