Uno de cada dos habitantes del país, en promedio, está contaminado del virus COVID-19. Al hacer tal impactante aseveración, en su visita a Barquisimeto, el doctor Douglas León Natera, presidente de la Federación Médica Venezolana, dio otras cifras no menos preocupantes y angustiantes: El 50 por ciento de la población, que no está contaminada, está expuesta a ser contagiada.
Natera manifestó que la dotación de los hospitales es de apenas el 3 ó 4 por ciento. Esto, en sus propias palabras, es nada, para atender a los pacientes. Señaló que al ritmo que se está desarrollando el proceso de vacunación contra la enfermedad, la población terminará de ser vacunada en diez años.
«515 trabajadores de la salud, hasta el día de ayer, habían perecido a consecuencia de haber contraído la enfermedad. De ellos, 352 eran médicos. La explicación de que el personal de primera línea que enfrenta a la COVID-19 es que no está protegido y, obligatoriamente, tiene contacto directo con los enfermos. Esto quiere decir que el 31 por ciento de muertes corresponde al personal sanitario y de ese porcentaje, el 25 por ciento es de profesionales de la Medicina», expresó el doctor León Natera, quien estuvo acompañado de su colega René Rivas, presidente del Colegio de Médicos del estado Lara y de directivos de esta institución.
Natera no se mostró pesismista del todo al comentar que el presidente de la legítima Asamblea Nacional y presidente interino de Venezuela, ingeniero Juan Guaidó, había logrado que fuesen liberados más de 100 millones de dólares para la adquisición de vacunas autorizadas por la Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud.
Se espera que mediante pacto concertado con el régimen de Maduro, esas vacunas lleguen oportunamente al país.
Por su parte, la Federación Médica Venezolana junto con los Colegios que agrupa tiene 40 espacios disponibles para que se realice el proceso de inmunización. Aún más: el Colegio de Médicos del estado Mérida ha ofrecido su centro recreativo, que puede ser acondicionado para 60 habitaciones sanitarias, a disposición de los enfermos de esa entidad federal.
Grandes retos
El doctor León Natera dijo que la Federación no hace ningún tipo de propaganda, porque todos sus miembros son profesionales dedicados a preservar la salud de la población. Criticó la forma como el régimen de Maduro ha enfrentado la enfermedad, ya que ésta se apareció en Venezuela y encontró desnudo el sistema de salud; es decir, sin nada.
«Porque ni siquiera tenía respiradores para los pacientes. Convirtió en los llamados hospitales centinelas a 46 centros dispensadores de salud, algunos de los cuales se encontraban cerrados hacía años. En cuanto a las pruebas para determinar la presencia del virus, fueron centralizadas en Caracas y los resultados eran dados a los quince días, en el transcurso de los cuales ya las personas que esperaban los análisis habían fallecido. Desde hace uno o dos meses, en cada entidad se realizan las pruebas; pero, naturalmente, son insuficientes. No está de acuerdo la Federación con la utilización de la denominada vacuna cubana, por cuanto no ha sido comprobada su efectividad y sólo pueden ser adquiridas las que tienen autorización de la OMS y OPS», destacó.
De igual forma, el doctor León Natera cuestionó la forma como el régimen madurista ha establecido el sistema de cuarentena, ya que ha carecido de criterio sensato, dado los casos de haber declarado el libertinaje en diciembre y en los carnavales, lo que motivó a que los casos aumentaran exponencialmente sin tomar en consideración las consecuencias.
«La Federación estima que debe haber una cuarentana de por lo menos cuatro semanas, para efectivamente frenar los contagios«, aseveró Natera que recomienda a la ciudadanía, no sólo que utilice tapabocas, lentes y guantes, y se lave las manos continuamente, sino que no se automedique, ni atienda a consejos de quienes nada saben de medicina, ni mucho menos de presuntas fórmulas mágicas.
Y en cuanto a milagros dijo que, lógicamente, hay que creer en Dios y ver en José Gregorio Hernández, la figura del médico abnegado, y que será el patrón de los profesionales de la medicina una vez que haya sido elevado a los altares.
En este sentido anunció que los médicos venezolanos estarán presentes en la ceremonia que la Iglesia Católica oficiará el día en que sea declarada la santidad del galeno nacido en Isnotú, estado Trujillo.
