El Bobo es un tiburón de cuerpo grande y bastante delgado cuya piel está cubierta de diminutos dentículos dérmicos que lo hacen muy suave al tacto en contraste con la áspera piel de la de otros de su especie.
Posee pequeños y poco llamativos surcos en el labio superior y los dientes de la mandíbula superior tienen una cúspide oblicua fuertemente serrada (que tienen forma de sierra) y los dientes inferiores en forma de cúspide lisa y estrecha.
Es uno de los tiburones pelágicos (que viven en aguas medias o próximo a la superficie) más abundante cerca de las plataformas continentales y en zonas insulares oceánicas con aguas cálidas, aunque también puede verse en mar abierto.
Sus crías junto con los juveniles, ocupan áreas en aguas de plataformas continentales, mientras que los adultos ocupan hábitats más oceánicos. Puede superar los 500 m de profundidad, pero es común encontrarlo en aguas profundas de los arrecifes y cerca de las laderas insulares oceánicas, en temperaturas entre 23‐24ºC.
Tiburón muy activo, con rápidos movimientos y puede ser agresivo.
Se le considera una especie vulnerable y debido a la reducción de sus poblaciones en el océano Atlántico, la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico recomendó en 2011 la implementación de medidas de conservación.
Desde 2012 en Venezuela está prohibida la captura, distribución y transporte de ejemplares de este tiburón.