Este jueves 25 de marzo Fedecámaras presentó al país una propuesta para que el sector privado pueda sumarse al plan de vacunación en Venezuela.
En una rueda de prensa, al cual Elimpulso.com tuvo acceso, Ricardo Cusanno, presidente de Fedecámaras, aseguró que Venezuela requiere del esfuerzo “conjunto de los actores públicos y privados para alcanzar niveles de inmunización suficientes que reduzcan el impacto de la enfermedad en la población”.
Cusanno puntualizó que el programa de vacunación no es un proyecto de comercialización sino un plan de apoyo al país que busca complementar la necesidad de llegar a la llamada “inmunidad de rebaño”.
“La salud no puede esperar por la burocracia. Los permisos de importación deben ser aprobados de manera expedita por las autoridades. No se ha planteado que un bien como el de la vacuna esté sujeto a comercialización. Sería irresponsable que hoy aspiramos tener rentas, ganancias, con un producto de primera necesidad en el marco de la pandemia”, destacó Cusanno.
El representante gremial indicó que tentativamente serían 6 millones de vacunas para 3 millones de venezolanos y recalcó que la aplicación sería gratuita para los trabajadores y familiares del sector privado.
“Queremos que sea un programa inclusivo. Queremos que Venezuela tenga salud para seguir produciendo con tranquilidad. Por ahora, el objetivo es traer 6 millones de dosis para ser aplicadas en 4 meses y medio. Lo ideal es que el país tenga vacunado al 70%, es decir 14 millones de personas. Esta es una acción de compromiso y responsabilidad social de la empresa privada venezolana para los trabajadores, sus familiares y para otros venezolanos», destacó.
En cuanto al proceso de inmunización, Cusanno indicó que los trabajadores sanitarios serían los primeros en ser vacunados, luego las personas de mayores de 59 años y por último los ciudadanos en edades comprendidas de 18 a 59 años.
“Los protocolos de vacunación serán determinados por la red epidemiología y la Academia Nacional de Medicina. El plan de vacunación será aplicado mediante 100 clínicas privadas, 500 dosis diarias, y sus aspectos financieros serán auditados por entidades habilitadas internacionales. Se aplicarán sólo vacunas aprobadas por el gobierno venezolano”, destacó el gremialista quien precisó que «la empresa es quien asume el costo de la vacuna» y el beneficiario (trabajador) «no debe cancelar absolutamente nada».
Por último, Cusanno aseguró que de ser aprobado este proyecto, el 20% de las dosis importadas por Fedecámaras serán entregadas al Estado.