La paralización del suministro de agua a Barquisimeto, Quíbor y el Tocuyo debido al accidente que afectó la aducción, profundiza aún más el colapso permanente que se vive en la región con el vital líquido y complica las posibilidades de cumplir con las medidas preventivas contra la COVID-19, aseguró el diputado Guillermo Palacios.
En efecto, el accidente que ocurrió en la tubería que conduce el agua desde la represa Dos Cerritos, hasta las poblaciones de El Tocuyo , Quíbor y Barquisimeto, como consecuencia de la crecida de una quebrada ubicada en la zona de San José de Quíbor, ha paralizado el suministro de agua hacia estas poblaciones, profundizando aún más el colapso de la crisis que ya tenemos de agua y las posibilidades de combatirla pandemia de la COVID-19.
Ante esta situación, tenemos que expresar, que si bien es cierto esto ha sido producto de un fenómeno natural, ratificamos porque no es ahora que lo hemos dicho, sino de hace mucho tiempo, el actual sistema de aducción para el suministro de agua a más de 1,5 millones de habitantes es frágil y la falta de seguridad, es por la irresponsabilidad del régimen de no haber concluido la represa Yacambú/Quíbor en el año 2012 como fue anunciado y la represa Dos Bocas en el año 2010 por la ineficacia y la corrupción del régimen.
“Por lo tanto, exigimos la inmediata continuación de estas obras para tener fuentes externas que garanticen el suministro de agua a estas poblaciones, es inaudito mantener a todas estas comunidades en esta situación, sencillamente porque no ha habido la previsión necesaria por parte de las autoridades para que se construyan obras tan importantes de esta naturaleza y cualquier accidente obliga a paralizar totalmente el suministro de agua a estos habitantes, causando un perjuicio mayor al que ya existe por la crisis permanente de agua y la presencia de la COVID-19”, señaló el legislador larense.
