Personal de las universidades públicas de Guayana rechazó y calificó como una violación a la autonomía universitaria la posibilidad de cobrar a través del Sistema Patria. “Nosotros tenemos una plataforma de pago ¿en qué mejora ese cambio?”, cuestionó José Mora, director de la Universidad de Oriente (UDO) en San Félix, quien expresó que ni profesores ni directivos están de acuerdo con la medida.
Los principales rectores de universidades del país, así como personal universitario en las regiones, se han pronunciado en rechazo, luego que el 6 de marzo, a través de un chat de la Oficina de Planificación del Sector Universitario (OPSU) en Telegram, se informara sobre la decisión -hasta ahora no oficial- de cancelar los salarios del personal universitario por medio de la plataforma gubernamental Patria.
Mora denunció que el mecanismo viola la autonomía universitaria, la ley de presupuesto y los procesos administrativos; “bajo todo punto de vista se está rompiendo el estamento legal”, afirmó.
Los trabajadores cobran salarios de 2 a 3 dólares, insuficientes para satisfacer las necesidades del personal. “Este pago por la vía del sistema Patria es una falta de respeto (…) hay muchos profesores que no han aceptado incluirse en un sistema politizado totalmente”, dijo.
El Sistema Patria es la plataforma creada por el gobierno de Maduro para entregar bonos y ayudas económicas -con poco poder de compra- a ciudadanos adeptos a su gobierno, que pertenezcan a alguna misión o en condiciones vulnerables.
Para Mora “es un chantaje del gobierno nacional a través del salario”. Ya los nulos ingresos habían llevado a la deserción del 40% de los profesores, estima Mora. Temen que tal cambio pueda generar que más profesores sigan abandonando las aulas.
“¿Cuál es la intención? ¿Cerrar las universidades?”, preguntó el directivo. Mora exigió que se invierta en el sector educativo para estimular la investigación y brindar un salario digno al personal universitario. “No podemos nosotros seguir llevando un triste mensaje a los aspirantes a estudiar. Dirán cada uno de esos muchachos ¿y para qué voy a estudiar? si el profesor Mora o el profesor tal lo que ganan son 2 mil, 3 mil bolívares, si yo en cualquier esquina pongo una mesita con tres productos que pueda conseguir y revender y gano más que ellos”, dijo.
Prevén mayor deserción
Raúl Brito, presidente de la Asociación de Profesores de la Universidad Nacional Experimental de Guayana (Apuneg), manifestó que se está “violentando la autonomía universitaria” con medidas que no tienen criterios académicos sino políticos y que dejan en incertidumbre al personal universitario.
Brito señaló que esta es una forma de dar un mensaje sobre cómo se manejará a los profesores bajo los intereses políticos del gobierno. “Hoy es el Sistema Patria, mañana será eliminar la caja de ahorro, el fondo de jubilaciones (…) es algo denigrante por parte del gobierno”, expresó.
“Prácticamente lo que están es matando a la universidad venezolana”, dijo. Señaló que, al contrario de este cambio, lo que necesitan es inversión en infraestructura y equipos, además de salarios y garantías de salud para el personal universitario. “Un profesor que gana cuatro dólares en una quincena no puede mantener a una familia”, insistió.
Detalló que de los 1.200 profesores que tenía el sector público, hoy quedan menos de 600 en las casas de estudio de Bolívar. Prevé que, ante los insuficientes salarios y esta nueva forma de pago, la deserción continuará.
Otro mecanismo de control social
Aula Abierta, junto a la Federación de Asociaciones de Profesores Universitarios de Venezuela y distintas organizaciones civiles, presentó este ocho de marzo un comunicado en rechazo a la medida. Advierten que: “La referida orden de materializarse, constituiría una nueva violación a la autonomía universitaria de las universidades, específicamente a su potestad exclusiva de organizar, administrar y disponer de su patrimonio”.
En el escrito denuncian que la supuesta decisión carece de cualquier elemento de legalidad y que existen preocupaciones en torno a los signos distintivos del “Sistema Patria”, que sugieren afiliación política e ideológica con el gobierno. “Permite inferir su utilización como un mecanismo de control social similar al carnet de la patria y que se extiende al sistema educativo universitario”, alertaron.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresó preocupación ante el mensaje de la OPSU. La comisión recordó que la autonomía universitaria es “un requisito para la libertad académica, que comprende a su vez la libertad para expresar opiniones sobre las instituciones y la sociedad”.
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