En medio de una nueva oleada migratoria miles de venezolanos huyen del país y en su travesía arriesgan sus vidas de múltiples y complejas formas en su afán de escapar de la tragedia y el hambre, enfrentando todo tipo de peligros, que incluso, han dejado varios fallecidos en las primeras semanas del 2021, asegura FundaRedes.
En su más reciente investigación titulada «Condiciones cada vez más precarias ponen en riesgo la vida de los migrantes venezolanos», FundaRedes presenta la documentación hecha por los activistas que se trasladaron a las zonas que transitan los migrantes, donde se recogieron numerosos testimonios y casos de los graves peligros a los que se someten los ciudadanos en búsqueda de sobrevivencia en otras naciones.
Los venezolanos – revela la ONG- caminan largos trayectos de miles de kilómetros exponiéndose a la deshidratación y el deterioro de su salud, a controles militares y de grupos armados irregulares, además de enfrentarse a situaciones como la ocurrida durante la última semana de enero de 2021 cuando 11 migrantes perdieron la vida, entre ellos dos niños, y 27 resultaron heridos en accidentes de tránsito en la frontera colombo venezolana.
Así mismo, la organización defensora de derechos humanos evidencia en su publicación uno de los factores que representan mayor riesgo para los migrantes, como es que al llegar a la frontera sin planes definidos ni ahorros, muchos optan por quedarse allí temporalmente para buscar la manera de obtener ingresos que les permitan continuar el viaje, eso los expone a ser víctimas de explotación sexual, trata de personas, reclutamiento, trabajos forzados y otras formas de violencia.
El informe indica que, ante el cierre de fronteras producto de las restricciones por la pandemia, los migrantes deben salir del país haciendo uso de los pasos ilegales o trochas, “donde la presencia simultánea de militares y paramilitares en las trochas binacionales aumenta el riesgo de enfrentamientos armados con la guerrilla que también pugna por el control de estos territorios y pone en riesgo la vida de los migrantes”.
Además – agrega – deben cancelar un monto en pesos colombianos o dólares tanto por la movilización como por el equipaje.
En noviembre de 2020, FundaRedes presentó ante instancias internacionales una denuncia formal sobre la grave vulneración de los derechos fundamentales de los migrantes forzados venezolanos, quienes huyen del país por la emergencia humanitaria compleja agravada con la pandemia por COVID-19.
Igualmente entregó el 2 de febrero de 2021 un informe ante el relator especial sobre los derechos humanos de las personas migrantes de la ONU, Felipe González, en aras de visibilizar la situación de los migrantes venezolanos en Latinoamérica, donde varios países han adoptado como política la devolución de migrantes o restricciones en el acceso a sus países.
El Estado venezolano ha aplicado políticas de sometimiento a la población que pasan por la destrucción del aparato económico, lo que creó una situación de emergencia humanitaria compleja que arrojó a los venezolanos a emprender una migración masiva con los riesgos que esto conlleva.
«Todo este contexto se mantiene y empeora, pues se espera un repunte migratorio en los próximos meses de 2021″, según lo señaló Eduardo Stein, representante especial de ACNUR y de la Organización Internacional de Migraciones (OIM) para la Atención de los Migrantes y Refugiados Venezolanos, quien aseveró en diciembre: «sigue saliendo gente de Venezuela» cuando presentó el llamado “Plan de Respuesta” a la mayor crisis migratoria que enfrenta el hemisferio occidental, iniciativa que incluye la modificación de leyes de cada país para acoger a los migrantes venezolanos que, según ACNUR, para finales de este año serán más de 6 millones.