El príncipe Felipe de Gran Bretaña, de 99 años, fue ingresado a un hospital de Londres tras sentir molestias, dijo informó el Palacio de Buckingham el miércoles.
El palacio dijo que el esposo de la reina Isabel II fue internado en el hospital privado Rey Eduardo VII el martes por la noche.
Señaló que la admisión fue una “medida precautoria” tomada bajo consejo del médico de Felipe. El palacio dijo que se espera que permanezca ingresado por varios días para “observación y reposo”.
Su enfermedad no está relacionada al COVID-19. La reina y Felipe fueron vacunados contra el coronavirus a comienzos de enero.
Felipe, también conocido como el duque de Edimburgo, se retiró de los compromisos públicos en 2017 y rara vez aparece en público.
Durante el actual cierre por coronavirus en Inglaterra ha permanecido en el Castillo de Windsor, al oeste de Londres, con la reina.
Felipe se casó con la entonces princesa Isabel en 1947 y es el consorte real más longevo de la historia británica. Él y la reina tienen cuatro hijos, ocho nietos y nueve bisnietos.
Ex oficial naval y jugador de polo aficionado, Felipe tuvo muy buena salud hasta avanzada edad, pero en años recientes ha tenido varios males.
En 2011, fue llevado de emergencia en helicóptero tras sufrir dolores en el pecho por una arteria coronaria bloqueada. En 2017, pasó dos noches en el hospital Rey Eduardo VII y en 2018 fue hospitalizado por 10 días por un reemplazo de cadera.
La última vez que fue internado fue en diciembre de 2019, cuando pasó cuatro noches en el hospital Rey Eduardo VII por lo que el palacio dijo era un tratamiento planeado por una enfermedad previa.
Se vio obligado a renunciar a conducir a los 97 años, después de chocar con un auto mientras conducía una Land Rover cerca de la propiedad real en Sandringham en enero de 2019. Felipe necesitó ayuda para salir de la Land Rover pero no resultó herido. La mujer en el otro auto sufrió una fractura de muñeca.