La Unión Europea (UE) expresó este martes que está dispuesta a asumir una postura más firme hacia Rusia tras el encarcelamiento del líder opositor Alexei Navalny, incluso con la posibilidad de aplicar sanciones.
El comisario de asuntos exteriores de la UE, Josep Borrell, afirmó que presentará propuestas en la próxima reunión de cancilleres del bloque. Los países del continente están divididos en cuanto a cómo encarar el tema de Rusia, y hasta ahora ninguno había mencionado ese tipo de medidas.
“Será decisión de los estados miembro cuáles serán los próximos pasos, pero sí, esto podría incluir sanciones. Y yo entregaré propuestas concretas usando el derecho a lanzar iniciativas que tiene el alto representante”, dijo Borrell a miembros del Parlamento Europeo.
“Las medidas de contención deberán incluir una combinación de acciones robustas contra la desinformación, los ciberataques y otros posibles desafíos híbridos”, aseveró el funcionario.
Navalny fue arrestado en enero al regresar a Moscú tras pasar meses en Alemania recuperándose de un intento de envenenarlo, del cual el líder opositor acusa al Kremlin.
La UE ha impuesto sanciones contra funcionarios quienes considera responsables del envenenamiento, pero Navalny ha pedido al bloque prohibir el ingreso y congelar las cuentas a varios oligarcas rusos cercanos al presidente ruso Vladimir Putin. Borrell no dio detalles sobre sus propuestas.
El lunes, Alemania, Polonia y Suecia declararon cada uno a un diplomático ruso en su territorio “persona non grata”, en represalia por la medida similar tomada por el gobierno ruso, quien expulsó a diplomáticos de esos países bajo acusaciones de asistir a una marcha en favor de Navalny.
La decisión del gobierno ruso fue particularmente ofensiva para la UE ya que tuvo lugar al mismo tiempo en que Borrell se reunía con el canciller ruso Serguei Lavrov. Borrell relató que se enteró de la medida por medio de las redes sociales.
Varios parlamentarios criticaron a Borrell por escoger este momento para visitar Rusia y por no refutar las aseveraciones de Lavrov durante una rueda de prensa que algunos calificaron de “emboscada”.