Dedicado a la profesora Dip. Bolivia Suárez.
Un maestro sub alimentado con un sueldo de dos dólares mensuales, el más bajo del mundo y unos niños desnutridos, es una combinación perfecta para la ruina total de un país.
El flamante «maestro» Aristóbulo Istúriz Ministro de educación de Nicolás Maduro, dijo que él iba a nivelar el salario de un educador al de un obrero…y cumplió. Lapidarias palabras que reflejan el verdadero pandemonio a que nos sumergieron estos sátrapas, haciéndole un daño al obrero por cuanto éste no tendría ninguna motivación para progresar en la vida y el daño desmoralizante a todas luces al maestro , dándole un zarpazo fulminante a la meritocracia.
La educación es el principal deber del estado. Nunca en este suelo patrio los formadores habían estado sumidos a tanta desesperanza arrastrando al país a una ignorancia galopante. Bolívar dijo: «Un ser sin educación es un ser incompleto», «un hombre ignorante es instrumento ciego de su propia destrucción». «Moral y luces son nuestras primeras necesidades». Y estos «bolivarianos» pisotean al educador en cada acción humillante que le infringen al ente docente.
Menos mal que los maestros entendieron aquella máxima que reza mientras hayan maestros de pie nunca habrá un pueblo arrodillado, y el magisterio venezolano es la punta de lanza con los padres y representantes para sacar a Venezuela de esta tiranía
El prof. Frank Andrade, luchador de toda la vida por los valores democráticos, representante de «educadores con su gente» y secretario regional de educadores de Primero Justicia, plantea que el día del educador. 15 de Enero no hay nada que celebrar, pero sí que luchar, y en ese sentido plantea una » Huelga General» hasta lograr las reivindicaciones de éste alto cometido social y la mejor manera de reconstruir el país; con razón la Canciller federal de Alemania Angela Merkel con orgullo afirma que los educadores de su país son los profesionales mejor pagados, pues constituyen la base tecnológica del desarrollo de dicha nación europea.
No podemos perder el legado de Simón Rodríguez, Arturo Uslar Pietri, Andrés Bello y Luis Beltrán Prieto Figueroa que forjaron una plataforma en los modelos del aprendizaje para una Venezuela próspera y desarrollada, técnica y científicamente sin perder el valor humanístico.
Esperemos que nuestros diputados amparados en nuestra constitución, en artículos referentes al derecho a la vida, a la alimentación a un salario acordé con su alta función social y reconocidos por una gran cantidad de países , legislen para devolverle la majestad al maestro en beneficio de los niños y por supuesto al desarrollo del país. Iniciativa planteada en la legítima Asamblea Nacional por la extinta educadora y diputada Bolivia Suárez.
Al maestro le deseo con cariño que la luz del túnel termine de llegar iluminando nuestra querida patria.
Gorquin Camacaro