Los pobladores de Santa Rosa, amanecieron embargados de nostalgia este 14 de enero, y es que por primera vez en 165 años no se lleva a cabo la procesión de la Divina Pastora, debido a la pandemia de la COVID-19.
Gisela Lucena, habitante del pueblo, expresó que se siente una tristeza en las calles del mismo, pero se mantiene la fe en que la Virgen obre para el bien del país y el mundo.
Lucena expresó que con mucha fe, esperan los próximos 14 de enero, para seguir llevando a cabo la tradicional procesión y le piden por la salud a la sagrada imagen.