Cumpliendo con nuestra Visión y Misión y, por instrucciones de algunos integrantes de la Red, continúo con la transcripción del documento redactado por el economista y profesor universitario Gerardo Álvarez, cito:
Este aumento exponencial de la liquidez se debe fundamentalmente, como ya hemos señalado, a la continua y persistente inyección de dinero inorgánico al torrente monetario de la economía nacional por parte de un Banco Central que ha perdido su autonomía desde hace muchos años y cuya política expansiva ha sido sin lugar a dudas, la principal causa del mas grave desequilibrio macroeconómico que hoy atraviesa nuestro país. Para ilustrar esta aseveración permítanme ofrecerles algunas cifras: Según cifras del Banco Central, la liquidez monetaria al 31-12-2019 fue en términos redondos de 40 billones de bolívares y según la última información disponible de la firma Ecoanalítica, al 20-11-20 la misma alcanzó, en términos redondos, 365 billones de bolívares. Hasta ese momento había aumentado 912.5%, pero si esta última cifra la proyectamos a la fecha de escribir este artículo, la liquidez debe rondar los 400 billones, lo que nos arroja un aumento de 1.000% en lo que va del año.
Varias son las razones de este inédito comportamiento, pero quizás la más riesgosa en mi humilde opinión sea el desconocimiento de causa de parte de quienes dirigen el Instituto Emisor pues asumo que no disciernen sobre las graves consecuencias de esta actuación en la economía venezolana, a menos que sea una imposición directa de parte del ejecutivo nacional en su insaciable afán de crear dinero de la nada con la finalidad de alcanzar sus objetivos populistas, clientelares y tranquilizadores de una población diezmada que clama por pan y circo.
Esta constante inyección de dinero ha sido destinada, probablemente, pues el gobierno no publica estas cifras al detalle, a los pagos de sueldos y salarios de toda la administración pública tanto centralizada como descentralizada (estamos hablando de unos cinco millones de personas, aproximadamente), a los pagos de pensionados y jubilados que según cifras ofíciales alcanzan más de cuatro millones y medio de venezolanos adiciónales a los primeros. En principio estos pagos eran cubiertos por los ingresos petroleros, pero cuando no fueron suficientes, al gobierno no le quedó otra alternativa para mantener el status quo, que acudir al Instituto Emisor a endeudarse, toda vez que los créditos internacionales se iban cerrando progresivamente. También se destinan estos ingentes recursos inorgánicos a financiar tanto los vergonzosos e insuficientes aumentos de sueldos y salarios de la administración pública, jubilados y pensionados, como a la gran cantidad de trasferencias monetarias (que ha sido la última modalidad utilizada por el gobierno)a través de las llamadas “misiones sociales” cuyos montos totales lamentablemente se desconocen , pero que se realizan todos los meses a un grupo de venezolanos escogidos previamente por el gobierno nacional y que cumplen ciertas condiciones establecidas por ellos mismos, casi todas asociados con el llamado “monedero patria y carnet de la patria” como si fueran los únicos necesitados de recibir estos subsidios monetarios. De acuerdo a información no oficial existen cerca de 20 misiones sociales cuyo monto a transferir supera con creces el salario mínimo de Bs 800.000…
Continuará…
¡Les deseamos prosperidad y felicidad!
Maximiliano Pérez Apóstol