No hubo sorpresas en parlamentarias. El país mostró, en este primer round, su falta de expectativas sobre eventos parciales y paralelos, convocados para apoyar a sus organizadores y no para resolver los problemas gigantes de la gente. El segundo round tampoco sorprenderá.
El pronunciamiento corresponde al economista y presidente de Datanálisis. Luis Vicente León, al formular algunos comentarios en torno a los resultados de las elecciones del 6 de diciembre, a través de su cuenta oficial en Twitter, donde destaca que el hecho numérico es que sólo una quinta parte de los electores con derecho a votar lo hicieron por la oferta revolucionaria, pero con ese soporte exiguo y sin reconocimiento opositor, tomarán el hemiciclo y elaborarán leyes que para nosotros serán de obligatorio cumplimiento.
Advierte que ahora, que más allá de los discursos encendidos, las amenazas y promesas (hasta ahora incumplidas) y las celebraciones de triunfos fatuos, la verdad verdadera es que siguen sin responder la pregunta principal: ¿y ahora qué?
Advierte que tienes la abstención y seguramente arderá Troya dentro del chavismo. Pero la probabilidad de que esto conduzca a presiones de cambio político es extremadamente baja, lo que resultará indefectiblemente en nuevas frustraciones y divisiones internas en la oposición. ¿qué celebrar?
Explica que la abstención no ocurre como respuesta al llamado específico de la oposición institucional, sino como consecuencia de la desconfianza nacional en el sector político, que la incluye. La pregunta es: ¿Qué se debe celebrar?
Miremos esto de manera pragmática. La probabilidad de que la oposición institucional llegue a las regionales y convenza a todas sus fuerzas internas de seguir pasiva y volver a desperdiciar el 80% del país que no votó por Maduro en las parlamentarias, es casi cero.
Afirma asimismo, que el irreconocimiento a la nueva AN es un símbolo de lucha política y un guardadito para el futuro. Pero esa nueva AN legislará a partir del 5 de enero y para quienes operamos y vivimos en Venezuela serán de obligatorio cumplimiento. Esa es la triste realidad.
Se pregunta si pierde Guaidó su relevancia el 5 de enero? Y asegura que lo, debido a que USA y muchos países europeos y latinos lo reconocerán por continuidad administrativa y él sigue siendo el único con una licencia institucional. Es una licencia vencida pero el resto aún no tiene licencia y su camino es más largo.
¿Cuáles son los retos de Guaidó ahora?
- Convertir la abstención en acción que promueva cambio o enfrentar la irrelevancia
- Evitar que nuevos diputados en el parlamento se conviertan en la nueva oposición
- Esquivar los retos que lanzarán Capriles y MCM por el poder interno, señala el presidente de Datanálisis.
