Estas palabras son válidas para todos los venezolanos, pero quiero centrarlas especialmente en los militantes, amigos y simpatizantes de COPEI en cualquier época. Gracias a la ambición desmedida de algunos hoy pareciera que el partido está dividido en dos o tres partes, incluso irreconciliables algunas de ellas. No es así. El problema de fondo es en las alturas debido a la lucha por el poder interno al margen de los estatutos y reglamentos del partido. Hay un COPEI legítimo presidido por Roberto Enríquez y reconocido por los organismos internacionales de la Democracia Cristiana en el continente y en el mundo. Lo demás han sido intentos estimulados y controlados desde la dictadura para intervenirlo, despojarlo de sus símbolos históricos, nombre, tarjeta electoral y algunas consignas fundamentales mediante un proceso de judicialización en un país donde desapareció el Derecho y también la autonomía de los poderes públicos.
Los partidos más importantes, además de COPEI, como Acción Democrática, Primero Justicia, Voluntad Popular y otros menores han sido víctimas igualmente del proceso interventor. Todo con miras a las cuestionadas elecciones parlamentarias convocadas para el 6 de diciembre próximo. Las legítimas autoridades de cada una de estas organizaciones están dictando instrucciones a su gente sobre el comportamiento que deben mantener.
En el caso concreto de COPEI es bueno dejar claro que rechazamos ese fraudulento proceso. En consecuencia, ese día, todos debemos quedarnos en casa. La escandalosa y cara propaganda en la cual se utiliza el nombre de COPEI y su tarjeta histórica, la participación en cuñas y programas de radio y televisión promoviendo el fraude son iniciativas estimuladas y pagadas por la dictadura. Lamentablemente a eso se han prestado dirigentes y aspirantes a ser diputados en dirección contraria a la ética y a la histórica posición del partido comprometido en la lucha por el cese de la usurpación.
Sintetizando en este tema. COPEI rechaza ese proceso. No participará de ninguna manera. Quienes se han prestado a ello están al margen de la estructura legítima del partido y contrariando la posición del Consejo Superior de la Democracia Cristiana en Venezuela creado por la Organización Demócrata Cristiana de América –ODCA-. Todo lo contrario es interesado y falso.
Por otra parte, nos hemos comprometido a participar en la Consulta Popular convocada para el próximo 12-D dentro de un esquema a iniciar desde el 7 del mismo mes. Las tres preguntas ya son ampliamente conocidas. Cada venezolano, dentro y fuera del país, tienen plena libertad para responderlas de manera sencilla y clara. A estas alturas el tema está suficientemente analizado. Nosotros responderemos con una trilogía de SI para fortalecer e institucionalizar, como hemos dicho, nuestro trabajo para lograr el cese de la usurpación con la salida de Maduro, una transición adecuada para lograr elecciones presidenciales y parlamentarias verdaderamente libres y lograr el respaldo activo de la comunidad internacional para estos objetivos.
Oswaldo Álvarez Paz
@osalpaz