El cierre de las fronteras terrestres debido a la pandemia ha llevado a los venezolanos a huir de su país por trochas o rutas marítimas peligrosas, alertó un informe de la Organización de Estados Americanos (OEA), que estima en 5,4 millones los migrantes y refugiados que han abandonado Venezuela.
Según el «Informe de situación noviembre 2020. Crisis de migrantes y refugiados venezolanos», publicado este martes, ese hecho aumenta la «condición de vulnerabilidad» de los migrantes venezolanos.
“Para la fecha habrían retornado a su país cerca de 130.000 venezolanos”, detalló el documento.
Sin embargo, indicó que a raíz de la reapertura económica en países como Colombia, Perú y Ecuador ha disminuido el retorno y se ha reactivado el flujo de salida desde Venezuela.
“Alrededor de 500 venezolanos están ingresando a Colombia por caminos irregulares diariamente», apunta el estudio, que agrega que algunos de los migrantes viajan acompañados de «uno a tres familiares”.
Uno de los casos sobre el que llamó la atención la Oficina de la Secretaría General de la OEA para la crisis de migrantes y refugiados venezolanos ocurrió el pasado 22 de noviembre, cuando un grupo de 29 venezolanos, entre ellos 16 menores de edad, fue deportado de Trinidad y Tobago, y posteriormente desapareció durante 48 horas.
“Este grupo de personas pudo regresar a la isla después de una sentencia de la Corte Suprema de este país, así como pronunciamientos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la Oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos”, agregó el informe.
“En ese contexto, la OEA advirtió de que, «con el cierre de las fronteras y la profundización de la crisis en Venezuela, se hace cada vez más frecuente que los venezolanos arriesguen su vida huyendo desesperados por el mar en una embarcación menor que los traslade a alguna isla del Caribe”.