Las migrantes venezolanas trabajan más horas pero devengan casi la mitad que las mujeres colombianas y viven una situación de «precariedad laboral» que «evidencia la violencia que sufren» en el país andino, según un informe divulgado este miércoles.
El estudio, publicado en el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer y elaborado por la organización Cuso Internacional, «llama la atención sobre la vulneración de los derechos de las migrantes por su situación laboral de extrema precariedad en el país».
El documento, cuya elaboración fue apoyada por el Gobierno de Canadá, refleja que hay una alta informalidad entre las venezolanas en el país «que les impide tener una protección social».
«Si bien este fenómeno también afecta a las mujeres colombianas (60 %), el impacto es mucho mayor para las provenientes del país vecino (91,1 %)», agregó la información.
Igualmente las venezolanas trabajan 42,5 horas semanales en comparación con las 37 de las mujeres colombianas, pero «reciben ingresos que en promedio son inferiores al salario mínimo y son casi la mitad de los que devengan sus pares locales».
En Colombia, según cifras de la autoridad migratoria con corte al 30 de junio, hay 1,4 millones de venezolanos, de los cuales 679.203 son mujeres y 728.852 hombres.
Índice de calidad de empleo
Los autores del estudio e investigadores de la Universidad Externado de Colombia también realizaron un índice de la calidad del empleo, para el que tuvieron en cuenta los ingresos, la estabilidad y seguridad del trabajo, la seguridad social y las horas de trabajo.
Bajo esos factores, el informe «Dinámicas laborales de las mujeres migrantes venezolanas en Colombia» resalta que «la calidad del empleo de las mujeres venezolanas es más de un 50 % inferior a la calidad del empleo de las mujeres colombianas, nivel de por sí ya precario».
Al mirar el trabajo formal, las colombianas tienen ingresos mensuales que, en promedio, oscilan en 1,4 millones de pesos (unos 403 dólares), mientras que los de las venezolanas se ubican en 785.000 pesos (unos 217 dólares).
«Tanto las mujeres colombianas como venezolanas están rezagadas en cuanto al acceso de un empleo formal y digno. No obstante, dadas las circunstancias en que llegan las mujeres provenientes del país vecino, sin recursos económicos y redes de apoyo, se enfrentan a mayores barreras para ingresar al mercado de trabajo», afirmó el director de Cuso Internacional en Colombia, Alejandro Matos.