Aunque en los nueve meses pasados desde que fue declarada la cuarentena prolongada como consecuencia de la pandemia de la COVID-19, el comercio había registrado una caída del 60% en sus ventas en comparación con el año 2019, ahora, que ha sido suspendida la medida durante el mes de diciembre, los comerciantes esperan una mejoría en la actividad.
“Es imposible que podamos lograr recuperar el valor de las pérdidas registradas, pero sí habrá una gran actividad a partir del próximo primero de diciembre cuando la gente no esté impedida de movilizarse como ha ocurrido hasta ahora”, declaró Eldi Montero, presidente de la Cámara de Comercio del estado Lara.
Desde hacia seis meses, manifestó, se había solicitado a las autoridades una mayor flexibilización para la actividad comercial en todas las ramas, ya que este es el principal sector económico de Iribarren, por cuanto no sólo satisface sus propias necesidades sino de los demás municipios del estado y de entidades vecinas.
Somos el quinto estado en importancia del país y el período de cuarentena radical dificultaba realizar las actividades con normalidad.
Existe el firme compromiso de los comerciantes, tanto los afiliados como los que no pertenecen a la Cámara, de guardar rigurosamente las medidas de bioseguridad en todos los establecimientos: utilización de gel, desinfección en las alfombras de entrada, distanciamiento, uso de mascarillas y, en general, todo lo que sea necesario para garantizar la salud.
En ningún momento los miembros de la institución han dejado de cumplir esas disposiciones ordenadas por las autoridades sanitarias, dijo Montero. Y a partir del primero de diciembre serán más rígidos los controles, porque estamos conscientes de que la preservación de la salud es una obligación de todos.