Si los habitantes de las grandes ciudades están pasando penurias con los servicios públicos, en las zonas rurales la situación es cada vez más insostenible. Los habitantes de la parroquia Diego de Lozada iniciaron este lunes la grave situación que viven con el agua, el gas doméstico, la electricidad, entre otros.
El paso para Cubiro y las zonas aledañas se mantiene cerrado por la protesta pacífica que llevan a cabo productores, amas de casa, comerciantes y la sociedad civil en general en el sector Paso Real.
Al menos 10 meses sin recibir bombas de gas domestico tienen los habitantes de esa populosa parroquia del municipio Jiménez. Además la falta de gasolina mantiene en jaque a los productores agropecuarios, pues no pueden movilizarse hacia sus siembras ni mucho menos trasladarla a los centros de distribución.
Esta no será la única protesta que ejecutarán los cubireños y habitantes de distintos sectores del municipio Jiménez. Al menos 150 personas se trasladaron a Barquisimeto a reclamar esta situación frente a la gobernación del estado Lara, para exigir a quienes ocupan el lugar, solucionen la grave situación que padecen.
Los manifestantes aseguraron que no abrirán el paso hasta que sean atendidos por las autoridades.