Este es un régimen tan débil que para infundir autoridad recurre al hostigamiento, persecución, encarcelamiento y muerte de indefensas personas cuando éstas salen a la calle a protestar, declaró a Elimpulso. com, Filiberto Peña Canelón, abogado y exsecretario general de gobierno de Lara.
Pero, es tan malo que no puede garantizar la seguridad de los ciudadanos y utiliza a delincuentes en grupos de colectivos armados y motorizados, para atemorizar barriadas y urbanizaciones en todo el país.
Tanto a Hugo Chávez como a Nicolás Maduro se le han fugado del país, cruzando la frontera hacia Colombia, los principales líderes de oposición.
Siendo Diosdado Cabello, ministro de Relaciones Interiores, Pedro Carmona Estanga, el 24 de mayo del 2002, quien se había refugiado en la embajada del vecino país, salió de Venezuela y el hoy presidente de la Constituyente señaló a la Disip de haberlo dejado ir.
Carlos Ortega Carvajal, expresidente de la Central de Trabajadores de Venezuela, se fugó junto con Darío Farías y el capitán Rafael Farías de la Cárcel de Ramo Verde en 2006.
El 17 de noviembre de 2017, en el ejercicio del mencionado ministerio por parte de Néstor Reverol, burlando 29 puntos de control del régimen desde Caracas a la frontera, se fue Antonio Ledezma, alcalde metropolitano de Caracas, acusado de las movilizaciones del año 2014. Ese hecho ocurrió un día después de haberse iniciado el diálogo en República Dominicana, que había sido calificado por el dirigente de Alianza Bravo Pueblo como una burla de Maduro.
Y al mismo Reverol se le fue Leopoldo López esta semana y ya ha sido recibido por el presidente del gobierno español, quien ha reconocido que Maduro es un dictador.
Los dirigentes políticos que se han ido, indudablemente, han demostrado ser valientes y el régimen, cada vez que ha ocurrido un hecho de esa naturaleza, ha desatado una cacería cruel.
En este sentido, en el último caso, han violado el tratado de Viena al proceder violentamente contra funcionarios de la embajada española y ciudadanos democráticos como es el caso de Ronald Carreño, un periodista larense, a quien lo han secuestrado por el solo hecho de ser militante del partido de Leopoldo López.
Del régimen todo lo malo se puede esperar, ya que ha sometido a toda la población al mayor sufrimiento por el colapso de los servicios públicos y ahora ha organizado un fraude electoral para tener un poder Legislativo, que no será reconocido por los países democráticos, ni tampoco por la mayoría de los venezolanos, manifestó Fili Peña Canelón.