Un llamado al Consejo Nacional de Universidades (CNU) para que atienda la situación de falta de transparencia y auditabilidad del proceso de asignación de cupos mediante el Sistema Nacional de Ingreso (SNI) 2020, hizo la Universidad Simón Bolívar.
El llamado fue acordado por el Consejo Directivo, en reunión del 16 de octubre pasado, una vez conocido el Informe preliminar sobre el proceso de asignación de aspirantes a la USB a través del Sistema Nacional de Ingreso-OPSU 2020 elaborado por la Dirección de Admisión y Control de Estudios (Dace).
De acuerdo con el informe, se incumplieron pautas del SNI 2020 al no publicarse la lista de cupos y demanda por carrera; al impedirse la consulta libre de los resultados; al suprimirse, nuevamente, las listas de espera; y al haberse ignorado el número de cupos asignados por la USB a la OPSU para ser administrados por el SNI y que fuera debidamente informado por la Universidad.
Sobre este último punto, este año la USB no recibió la comunicación de la OPSU, tal como había ocurrido desde 2008, en la que se informa del inicio del Proceso Nacional de Ingreso a la Educación Universitaria y en la que se solicita a las Universidades la tabla de cupos por carreras inherentes al Programa Nacional de Ingreso 2020.
A pesar de ello, las Autoridades Universitarias, miembros del Consejo Directivo, acordaron el 6 de julio de 2020, “aprobar el número de cupos disponibles para el año 2020 (2.315 cupos) y lo correspondiente a ser otorgado a la OPSU (80% – 1.852)”, decisión que se comunicó al organismo.
Sin embargo, la lista enviada por la OPSU a la USB incluye a 1.898 aspirantes asignados, un 5% adicional de los cupos por carrera que habían sido otorgados.
A nueve carreras cortas les fue asignado el número de aspirantes de acuerdo con el cupo otorgado, sin embargo, en cuatro carreras se asignó a un número superior de aspirantes y en una carrera se asignó un número inferior.
En las carreras largas, se observó que en trece casos se respetó el número de cupos otorgados por la USB, pero en ocho carreras se asignó un número superior de aspirantes, y en una carrera un número inferior. “Es preocupante lo ocurrido con las carreras Comercio Internacional (117%), Arquitectura (60%), Ingeniería de Mantenimiento (21%) y TSU en Administración Hotelera (23%), ya que se superan ampliamente los cupos que fueron otorgados por la USB. Por primera vez ocurrió la asignación de aspirantes a la nueva carrera de Economía, sin embargo, no hubo asignados a la nueva carrera de Licenciatura en Estudios y Artes Liberales a pesar de haberse informado el número de cupos disponibles”.
Irregularidades en la asignación
Un dato identificado por el análisis preliminar de DACE fue la asignación de aspirantes de manera discrecional, sin respetarse el índice académico de los aspirantes.
El informe de DACE también señala que durante julio y agosto se recibieron algunas referencias de aspirantes que luego de la fase IV de entrega de información preliminar y modificación de opciones, afirmaron que el sistema les mostraba la palabra “Admitible” en alguna de las carreras de la USB solicitadas. “Sin embargo, al momento de consultarse los resultados finales de la fase V de asignación, dichos aspirantes informaron que no fueron asignados a las carreras a las cuales habían sido preasignados, a pesar de no haber realizado modificaciones en sus opciones de carrera”.
Un ejemplo es el caso de un aspirante con índice 92,0283 que resultaría admisible en la carrera de Ingeniería de Producción con índice de referencia 91,8968, “pero no resultó admitido en dicha carrera, la cual modificó su índice de referencia a 92,3214”.
El informe indica que para la inscripción de los aspirantes asignados por OPSU es necesaria la definición del trimestre de ingreso de la Cohorte 2020, para que en función de ello, DACE pueda presentar un cronograma de inscripción que permita atender la inscripción con las condiciones de bioseguridad requeridas, destaca la información