El pasaje tiene nuevo precio. Sin embargo, representantes del sector transporte afirman que el ajuste, lejos enriquecerlos servirá para «no ahogarse en la orilla», pues las restricciones de movilidad que se han impuesto en el país por la pandemia, la escasez de gasolina y la profundización de la crisis económica han vuelto sus ingresos cada vez más irrisorios.
Los nuevos costos se derivan de reuniones en las que representantes del gremio y el régimen de Nicolás Maduro presentaron su propuestas tarifarias. Los primeros tenían meses urgidos por obtener ingresos que tardaran menos en sucumbir ante la hiperinflación que azota a la nación.
La pandemia por el coronavirus llegó para profundizar la crisis en la que ya se encontraba el sector. Según el presidente de Bloque de Transportistas del Oeste de Caracas, Hugo Ocando, antes de llegar la COVID-19 al país trabajaba solo 20% de la flota de unidades, al menos en Caracas, debido a los altos costos y la falta de repuestos.
El también presidente de Transporte Unido de Venezuela señaló que los primeros meses de cuarentena solo trabajó 5% de ese 20% debido a las escasez de gasolina y las restricciones de movilidad.
En este panorama cabría preguntarse si realmente el ingreso que en adelante percibirán los conductores cubre la estructura de costos para el cuidado y mantenimiento de las unidades de transporte y si alcanza para cubrir sus necesidades.
Lea más: www.talcualdigital.com