La agencia Associated Press (AP) aseguró que una fuente reveló que la salud del presidente Donald Trump era “muy preocupante“, antes de ingresar al hospital tras su contagio de COVID-19.
La agencia citó a una fuente que reveló que en el último día, los signos vitales del presidente habían sido preocupantes pero mejoraron desde su ingreso al hospital.
Esta mañana, el médico de Donald Trump, Sean Conley ofreció una conferencia desde el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed para dar a conocer detalles sobre el estado de salud del presidente Donald Trump.
Conley aseguró que el presidente Trump tuvo, como primeros síntomas de la enfermedad, tos y fatiga pero esto ya se está resolviendo.
Aseguró que no estaba utilizando oxígeno aunque no aclaró si en un momento previo había requerido.
Actualmente, Trump recibe atención multidisciplinaria y se monitorea, únicamente, para evitar complicaciones en el hospital, donde se revisa su función cardiaca, hepática y renal.
Tras darse a conocer el diagnóstico del presidente Trump, el médico aseguró que, de manera preventiva se le habían suministrado ocho gramos del coctel de anticuerpos de Regeneron, un tratamiento experimental.
Posteriormente se le estableció un tratamiento de cinco días con Remdesivir.
Conley declinó hablar sobre la forma en la que se contagió el presidente y tampoco contestó cuándo fue la última prueba de COVID-19 en la que dio negativo. Tampoco quiso adelantar una posible fecha de alta.