Si estuviera en condiciones normales el Sistema Eléctrico Nacional (SEN), éste podría suministrarle el servicio a 60 millones de personas, pero como fue dejado en el abandono hoy los apagones se intensifican cada día.
La opinión fue ofrecida a Elimpulso.com por un experto en la materia, profesor universitario y cuya identidad no puede ser dada a conocer porque el régimen impide que los técnicos hablen sobre el problema, de acuerdo con nuestro informante.
Dijo que Luis Motta Domínguez y Eustiquio Lugo Gómez, exministro de Energía Eléctrica y viceministro de Finanzas, Inversión y Alianzas Estratégicas, respectivamente, a quienes el gobierno de los Estados Unidos ofrece por cada uno recompensas de cinco millones de dólares para lograr la captura de ambos, nada hicieron por el mantenimiento del SEN.
Ahora se les busca por incurrir en corrupción en Venezuela y lavado de dólares en los Estados Unidos, además de aceptar sobornos de empresas contratistas.
Nuestro informante señaló que la capacidad instalada es de 35 mil megavatios, que permitiría a 60 millones de personas tener energía eléctrica; pero, ahora que somos alrededor de 25 millones de habitantes, porque unos cinco millones se han ido del país, existe un déficit de 4 mil megavatios, ya que sólo se producen 8 mil megavatios.
Ya en Caracas se están produciendo apagones, porque no hay suficiente generación de energía. La planta de Tacoa, que tiene tres turbinas para 1.600 megavatios, desde hace tres años está paralizada.
Motta Domínguez, cada vez que se reunía con el personal de la nómina mayor de la empresa eléctrica, nada más sentarse decía; “Vengo para que me escuchen y obedezcan. No acepto opiniones.”
De modo que como no conocía la operatividad de la empresa, ésta fue quedando en el abandono y no se invirtió en los trabajos de mantenimiento que se requería, ni mucho menos en la adquisición de los equipos para sustituir a los que se encontraban obsoletos, nuestro informante.