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No dormir bien
No tener un buen control del sueño trae cansancio y estrés. Esto ocasiona tensión muscular que puede ser expresada en dolor.
Además, disminuyen los niveles de energía que el cuerpo necesitará a la hora de ejercitarse
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Tomar café al levantarte
Tomar café no es un mal hábito, pero, debes esperar al menos 1 hora después de levantarte para tomarlo.
Esto se debe a que el cuerpo genera energía de manera natural y al ingerir café interfieres en el proceso y detendrás la producción
No desayunar lo suficiente
El desayuno es la comida más importante cuando hablamos de energía. Esta se encarga de distribuir los nutrientes que gastarás en tu día, y debes estar atento en consumir lo necesario para que tu cuerpo no se sienta afectado
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