Cuatro patrullas adscritas al Centro de Coordinación Policial de Torres, en Carora, llevan desde el viernes estacionadas frente a la sede de dicha institución, en la calle Coromoto, en virtud que no han sido equipadas de gasolina, pese a que en la estación de servicio 5 de Julio otros vehículos fueron surtidos de combustible en las últimas.
Son dos camionetas y dos vehículos pequeños los que llevan seis días parados sin prestar ninguna operación de seguridad a las comunidades porque no son considerados prioridad en las gasolineras, a pesar que Carmen Meléndez es la jefa de las Fuerzas Armadas Policiales de Lara y quien está al frente como responsable de la distribución de gasolina en la entidad.
Varios funcionarios de la policía de Lara destacados en Carora manifiestan en calidad de anonimato evitando amonestaciones administrativas de la institución, que son humillados en las gasolineras por parte de algunos militares, que no los catalogan como cuerpos de seguridad, sino que los meten en el mismo lote de conductores y motorizados que están en las interminables colas.
Una fuente vinculada a la policía estadal informa que cuando les logran equipar algunas unidades, apenas les surten entre 15 o 20 litros de gasolina que solo les dura pocas horas, viéndose obstaculizado el patrullaje en las barriadas, en las que ahora se recrudece la inseguridad.