Para muchos, el aislamiento preventivo es insostenible a largo plazo. La gran mayoría de las personas necesita recuperar su productividad y cumplir con sus obligaciones. Hacerlo cuidando los detalles es lo que puede ayudarnos a interrumpir las cadenas de contagio, manteniéndonos sanos a nosotros mismos y a quienes nos rodean. Recordemos siempre, que la lucha contra la pandemia es responsabilidad de todos.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), advierten que ha quedado demostrado que el coronavirus puede transmitirse de una persona a otra, de tres maneras:
Las gotículas: pequeñas gotas que expulsamos al toser o estornudar.
Los aerosoles: gotas diminutas (de menos de cinco micras o milésimas de milímetro) que expulsamos al respirar y al hablar, que quedan suspendidas más tiempo en el aire.
El contacto con las superficies: que han recibido gotículas o aerosoles con carga vírica; y donde el SarsCoV 2 puede permanecer durante días. Justamente, para reducir las probabilidades de contagio por contacto con las superficies, Cruzsalud formuló Covisol; un método de desinfección de superficies capaz de eliminar al virus causante del Covid-19.
Por su parte, el investigador José Luis Jiménez, químico de la Universidad de Colorado en Boulder, explica: “al respirar, estás emitiendo partículas de tu saliva o del flujo respiratorio, de la tráquea y de los pulmones. Si hablas, emites 10 veces más. Si gritas o cantas, 50 veces más (…) Si estás infectado, estas partículas llevan el virus y, al no ser muy pesadas, se quedan flotando igual que el humo”. Estudios publicados por el Journal of Aerosol Science confirman esta información.
Con estas certezas en mente, podemos identificar aquellas conductas que debemos adoptar para reducir el riesgo de contraer Covid-19.
- Prefiere espacios abiertos. Pensamos en la carga vírica de los aerosoles que emitimos, retomando la metáfora del humo: en un espacio bien ventilado, una nube de humo se dispersará rápidamente, mientras que en un espacio cerrado, la nube permanecerá suspendida entre nosotros por mucho más tiempo.
- Evita los lugares donde la gente cante o donde sea necesario gritar. Al cantar o gritar las cuerdas vocales vibran más, añadiendo más contenido del tracto respiratorio al aire. Incluso conservando el distanciamiento social, la mayor carga vírica implica un factor de riesgo considerable. De los casos de “super contagio” documentados por los CDC, el más famoso es el del coro de una iglesia en el estado de Washington (EE.UU), que se reunió en marzo durante un par de horas. Uno de sus integrantes tenía lo que se pensó era un resfriado común. Se contagiaron 53 de los 61 asistentes; tres de ellos fueron hospitalizados. Dos murieron. Todos tenían Covid-19.
- Usa correctamente el tapabocas. La efectividad del correcto uso de la mascarilla o tapabocas para prevenir el contagio de Covid-19, fue documentada por los CDC con el caso de una peluquería de Springfield (Missouri, EE.UU). Luego de evaluar a todos los trabajadores del establecimiento, se conoció que dos de sus empleados estaban contagiados. En sus esfuerzos por contener los contagios, las autoridades sanitarias contactaron a los 139 clientes que habían pasado por el local durante las semanas previas a la evaluación y detectaron que ninguno de ellos resultó contagiado o presentaba síntomas.
- Mantén la distancia: Otro aspecto en el que coinciden las autoridades sanitarias y los observatorios internacionales de epidemiología, es que las condiciones perfectas para la transmisión del Sars CoV-2 de una persona a otra, es pasar más de 15 minutos a menos de un metro de distancia, en un espacio cerrado con una persona contagiada. Recuerda que más del 45% de los contagiados son asintomáticos. Lo más recomendable es considerar a quienes nos rodean y a nosotros mismos como portadores asintomáticos, hasta que se demuestre lo contrario.
- Sanitiza tus espacios. No basta con el frecuente lavado de manos. Según una reciente publicación del JournalOf Hospital Infection, varias investigaciones revelan que el SarsCoV-2 puede permanecer durante días en superficies de uso frecuente, como por ejemplo, el metal de estanterías, tiradores y pasamanos; el vidrio en las ventanas y vitrinas, o el plástico de tarjetas y el mobiliario en áreas de alto tránsito. Solamente necesita llegar a tus ojos, nariz o boca para poder replicarse. Para reducir las probabilidades de contagio por contacto con las superficies, es necesario usar productos capaces de eliminar al Sars CoV-2 y que ofrezcan efecto residual.
Para esto, Cruzsalud formuló Covisol, un potente método de desinfección de superficies elaborado para combatir la pandemia. Las superficies que han sido tratadas con Covisol conservan su poder residual, manteniéndose libres del virus por mucho más tiempo. Así, reducimos las probabilidades de contagio por contacto con las superficies.