Delincuentes robaron por décima vez la Catedral Juan Pablo II de Ciudad Guayana, así lo informó el padre Gerardo Moreno este martes.
Los delincuentes rompieron la puerta de hierro y forzaron cerraduras y bisagras desde adentro del recinto, pues una de las ventanas también estaba forzada. Moreno sospecha que los autores del robo tendrían que ser personas que conocían a cabalidad el contenido de la bóveda y cómo estaba protegida.
De los depósitos se llevaron una computadora de mesa, un compresor de pintura, una máquina de soldar, y los bombillos que iban a utilizarse para la iluminación de la cruz.
Tanto el padre Moreno como monseñor Helizandro Terán, obispo titular de la Diócesis de Ciudad Guayana, coinciden en que las autoridades no han contribuido con la protección del recinto, pues manifiestan que han emitido varias denuncias y solicitudes de patrullaje a los cuerpos de seguridad para la protección de la catedral y no han recibido respuesta.
“Hemos hecho la denuncia ante el Cicpc, al principio vinieron o nosotros íbamos para allá pero no quedó en nada”, lamentó el padre Moreno.
“Bueno, ya uno tiene que seguir adelante, esto no puede ser un obstáculo, estos males tienen que ser para que uno siga impulsando la labor, que Dios nos ampare y nos ayude a salir de esta situación”, concluyó.
Hasta el cierre de esta edición aún no se hacía inventario para medir con exactitud la magnitud de los daños.
No es la primera vez
Las instalaciones de la catedral han sido vandalizadas por lo menos nueve veces más, Terán cuenta que en una ocasión los delincuentes se llevaron un transformador de corriente y más de 150 sillas de plástico, esto sin que las autoridades intervinieran.
“¡Hasta un transformador de luz se han robado! Es increíble, porque para robárselo tiene que ser alguien que sepa de electricidad y de cortar cables para llevárselo”, expresó el obispo.
El padre Gerardo Moreno informó que las denuncias y solicitudes de patrullaje continúan sin respuestas | Fotos William Urdaneta |
Para que esta vez no se llevaran el transformador, tuvieron que encerrarlo en otra bóveda con doble candado y conectarlo a una baranda de la pared.
La catedral ha sido víctima del hampa en varias ocasiones, pero uno de los robos más significativos fue el de la estatua La paternidad, hace dos años. A la pieza de bronce puro primero le cortaron los brazos y luego se llevaron lo demás. Las autoridades eclesiásticas aseguran que esta era una obra de arte costosa por su significado y por el material.
La catedral Juan Pablo II, ubicada en el espacio llamado La Cruz del Papa en Puerto Ordaz, está en construcción desde 2002, y no se ha concluido por falta de recursos, el proyecto se había abandonado y luego fue retomado en 2014.
Distintas iniciativas de la sociedad civil y la comunidad eclesiástica han emprendido campañas para financiar la conclusión de la catedral, que ya no será construida con su diseño original por la crisis económica del país y como un gesto de austeridad de la representación de la Iglesia Católica en la ciudad.
Terán informó que, aunque a mediados de 2019 el gobernador del estado Bolívar, Justo Noguera, ofreció financiamiento para iniciar los encofrados de las columnas del techo, los recursos nunca llegaron. “No pudimos continuar con el programa”, lamentó. La construcción del templo que tiene una capacidad aproximada para 1.200 personas continúa paralizada y bajo la amenaza del hampa.
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