Desde marzo a la fecha, los productores del valle de Quíbor han venido reduciendo sus áreas de cultivo, al 50 por ciento, debido a la falta de condiciones para trabajar la tierra.
Al aseverar tal hecho, Argenis Manzi, quien se ha convertido en la voz de los productores de la zona, dijo que las razones son, principalmente, las siguientes:
- La falta de combustibles. No tienen gasoil, ni gasolina, indispensables, para encender las bombas de agua que se utilizan en el riego, los tractores y equipos de producción.
- La misma falta de combustible impide sacar las cosechas a los centros de distribución y consumo. Se han perdido cantidades, no precisadas, de maíz, pimentón y ají dulce porque no llegan los camiones que hacían el transporte de esos frutos.
- Han aumentado considerablemente de precio los agroquímicos necesarios, ya que éstos son vendidos, en el mercado negro, a precio de moneda extranjera, sobre todo en dólares. En el país no hay suministro de esos insumos.
- Han empeorado los servicios de agua y electricidad, además de la falta de gas doméstico. Las familias desesperadas han venido recurriendo a la destrucción de toda planta que tenga tallos que puedan ser utilizados para cocinar. Ya casi se han acabado los yabos y desaparecieron los cujisales.
- Se ha impuesto la extorsión por parte de funcionarios uniformados, quienes cuando los productores pueden lograr sacar algunos productos, les exigen una serie de requisitos, tales como procedencia de la carga, facturas y otros detalles más. Incluso, llegan a amenazar con el decomiso bajo el pretexto de que se trata de mercancía de contrabando. Y exigen dinero.
En este sentido, el productor advirtió que no ha sido posible que las autoridades oigan los planteamientos tanto de los productores como de las comunidades, a fin de que se pueden ir resolviendo los problemas, los cuales se han agravado con el correr de los días.
Gran cantidad de productores han dejado de trabajar la tierra y quienes todavía se mantienen han reducido las áreas de cultivo, ya que no se están garantizando los costos de producción.