Ante esto, Luis Arroyo, presidente del Colegio de Profesores del Estado Lara, expresó a Elimpulso.com que «poniendo los pies sobre la tierra, no existen las mínimas condiciones para dar inicio a las clases ni vía online, y mucho menos, de forma presencial«.
Subrayó que esta idea «es imposible«, tomando en consideración que alrededor del 90% de las instituciones del país no tienen las condiciones físicas para recibir a los estudiantes: «Los baños, el agua, la electricidad, los materiales de laboratorio», pupitres, mobiliarios(…) esto no existe».
El agua es uno de los principales requerimientos para la higiene y protección ante el coronavirus, y según lo mencionado por Arroyo, las instituciones académicas del país carecen del líquido, y por ende, reafirma su opinión de considerar como «imposible» el regreso a clases.
Por otra parte, recordó que los docentes venezolanos reciben un salario paupérrimo que no da basto para cumplir con sus necesidades. «Nosotros estamos en un promedio de Bs. 1.800.00 el docente que más gana«.
Arroyo no negó que en un hipotético caso de que existan las condiciones mínimas de bioseguridad y un salario que vaya acorde con sus necesidades, los docentes de Venezuela estarán dispuestos a cumplir con sus labores profesionales, porque siguen con la vocación y la intención de brindar su conocimiento para ayudar en la educación de los niños y jóvenes venezolanos.
Sin embargo, en caso de no tener las condiciones de bioseguridad en las aulas ni salario oportuno, los profesores venezolanos no iniciarían el proceso académico.