La desesperanza se adueña de los barquisimetanos que pierden semanas de descanso por dormir en las colas por la gasolina
La situación con la escasez de gasolina cada vez es más crítica en el estado Lara. El 90% de las estaciones de servicio en toda la entidad tiene colas kilométricas de usuarios que tienen días esperando poder surtir combustible.
En los nueve municipios larenses la necesidad por gasolina se siente en las colas de usuarios que cansados, con hambre y hastiados de tanta espera, utilizan las redes sociales para liberar la tensión que genera la incertidumbre de que no sale de sus cabezas sobre si la gasolina llegará pronto o tendrán que seguir pernoctando en la calle hasta que una gandola de PDVSA se acerque a estos establecimientos.
El común denominador es el cansancio, sin embargo también se ve la solidaridad entre los barquisimetanos que esperan por una gandola con combustible. Entre todos se cuidan para no ser víctimas de la delincuencia, se brindan un café o hasta el almuerzo, cuando ven que el otro no tiene para comer, pues lo único que le acompaña en el bolsillo, son los dólares para pagar los litros de gasolina que pueda surtir a su vehículo.
Desde el oeste hasta el este de Barquisimeto se ven enormes colas para surtir combustible. En algunos casos de hasta 5 días, pues en ese tiempo no ha llegado ninguna carga con gasolina. También en el norte. Incluso los usuarios de la zona amenazaron este jueves con cerrar la intercomunal Barquisimeto Duaca si la gasolina no aparecía.
En Palavecino la situación no es diferente. La estación de servicio en La Piedad en la Intercomunal Barquisimeto Acarigua, hay personas que tienen 13 días esperando para poder surtir gasolina. “Desesperados”, fue el calificativo que utilizaron esos larenses cuando cerraron la vía el miércoles en la mañana pues ya están cansados de tanta espera.
Con la llegada de la noche todo cambia. El cansancio empieza a maltratar los párpados que luchan por no ceder, pero tantos días en la cola pueden más que las ganas de mantenerse despiertos. Las opciones que plantean la mayoría de los consultados a Elimpulso.com es turnarse. Unos duermen unas horas, mientras otros juegan dominó, o simplemente hablan de cualquier tema de los pocos que puedan quedar después de tener tantos días conviviendo en la fila.
Lo peor que les ha tocado vivir es la oscuridad que queda cuando llegan los cortes eléctricos en cualquiera de las estaciones de servicio en el estado Lara porque los apagones son a toda hora y en todos lados. Nadie duerme. Todos quedan expectantes ante el peligro que genera la calle a altas horas de la noche y sin luz.
“Esto es horrible, ninguno de los venezolanos merecemos esto. Que esperanzas vamos a tener después de tanta burla. Cuando llegue la gasolina y yo pueda echar a mi carro, quizás vuelva, ahorita no. Ahora lo que hay es indignación, tristeza y cansancio”, sentenció Nelida Sanchez una de las entrevistadas que tiene más de 4 días en la cola por gasolina.
