El secretario de Defensa Mark Esper dijo el miércoles que la mayoría de la gente cree que la explosión ocurrida el martes en Líbano que provocó la muerte de por lo menos 100 personas fue un accidente, contradiciendo al presidente Donald Trump, quien comentó que generales estadounidenses le mencionaron que probablemente fue causada por una bomba.
Esper señaló que Estados Unidos seguía recopilando información sobre la explosión, pero dijo que lo más probable es que se tratara de «un accidente, como se ha reportado”.
El martes, Trump dijo: “Parece un terrible ataque”.
El mandatario fue cuestionado sobre la razón por la que lo llamaba ataque y no accidente, sobre todo porque las autoridades libanesas aún no habían determinado la causa de la explosión. Comentó a los reporteros en la Casa Blanca que: “Parecería eso con base en la explosión. Me reuní con algunos de nuestros mejores generales y ellos parecer sentir que fue un ataque. Esto no fue un tipo de evento de explosión de una fábrica… Parecen pensar que fue un ataque. Fue una bomba de algún tipo”.
Desde el principio, funcionarios estadounidenses han dicho que no saben cuál fue la causa del incendio inicial y de las explosiones que dieron pie a una detonación más grande. Pero señalaron que sí creen los reportes del Líbano que afirman que lo que explotó fue una gran cantidad de nitrato de amonio que estaba almacenado luego de ser confiscado.
Con base en videos y otro tipo de evidencia, los expertos mencionaron que fuegos artificiales y nitrato de amonio fueron el combustible que provocó la explosión que sacudió la capital libanesa. La magnitud del daño, desde el área de la explosión en el puerto de Beirut hasta ventanas que se hicieron pedazos a kilómetros de distancia, se parecía a la provocada por otras explosiones relacionadas con el compuesto químico que a menudo es utilizado como fertilizante agrícola.
El compuesto generalmente no explota por cuenta propia y requiere de otra fuente de ignición. Eso probablemente provino de un incendio que alcanzó lo que parecían ser fuegos artificiales que estaban almacenados en el puerto. El gobierno libanés dijo que iba a poner a un número no especificado de funcionarios portuarios de Beirut bajo arresto domiciliario con una investigación pendiente en torno a cómo se almacenaron 2.750 toneladas de nitrato de amonio en el puerto durante años.