India comenzó las primeras pruebas en humanos de una nueva posible vacuna contra el coronavirus mientras el segundo país más poblado del mundo registró cerca de 49.000 nuevos contagios.
Las nuevas infecciones elevaron el total nacional de casos por encima de los 1,3 millones el sábado, con repuntes en una cuarta parte de los 36 estados y territorios del país.
India ha confirmado 31.358 decesos, de los cuales 757 se produjeron en las últimas 24 horas. Ha reportado una tasa de mortalidad mucho menor a la de las dos naciones más golpeadas por la pandemia, Estados Unidos y Brasil. De acuerdo con la Universidad Johns Hopkins, Estados Unidos tiene más de 4,1 millones de casos y Brasil se acerca a los 2,3 millones.
El Instituto de Ciencias Médicas de India, un importante hospital universitario en la capital, Nueva Delhi, dijo que el viernes administró la primera dosis de una vacuna en pruebas contra el COVID-19.
La posible vacuna, Covaxin, es una de las casi dos docenas que se están probando con humanos en todo el mundo.
Los países están realizando grandes apuestas en varias posibles vacunas, cerrando acuerdos de compra con farmacéuticas para conseguir el fármaco siempre y cuando los reguladores determinen que las dosis son seguras y efectivas.
Corea del Sur reportó también el sábado 113 nuevos casos confirmados de coronavirus en las últimas 24 horas, la primera vez que superaba los 100 diagnósticos positivos diarios en casi cuatro meses.
Pero el aumento era predecible ya que las autoridades contemplaban un repunte temporal impulsado por las infecciones importadas halladas entre las tripulaciones de barcos mercantes y por la repatriación de cientos de trabajadores de la construcción desde Irak.
Las cifras de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades surcoreanos elevaron a 14.092 el total de contagios en el país, incluyendo 298 decesos.
Según los Centros, 86 de los nuevos casos estuvieron ligados a llegadas internacionales mientras que los 27 restante fueron de transmisión local. Entre los importados había 36 trabajadores surcoreanos que regresaron desde Irak y 32 tripulantes de un mercante con bandera rusa atracado en el puerto de Busan, en el sur del país.
Las autoridades surcoreanas consideran que los casos importados son una amenaza menor que las transmisiones locales por la obligatoriedad de que quienes llegan del extranjero se sometan a una prueba de detección y pasen una cuarentena de dos semanas.
En Australia, cinco residentes más de Victoria murieron por COVID-19 y el estado confirmó 357 nuevos contagios en las últimas 24 horas. El primer ministro de la región, Daniel Andrews, rechazó el sábado descartar la imposición de nuevas restricciones, pero apuntó que la estrategia para frenar la propagación del virus era el uso obligatorio de mascarillas.
En el estado hay cerca de 4.000 casos activos de coronavirus, 313 de ellos en personal de salud.
Por su parte, China reportó 34 nuevos casos de coronavirus. Entre los contagios confirmados en las últimas 24 horas hasta la medianoche del viernes había cinco personas que se contagiaron en el extranjero, señaló la Comisión Nacional de Salud. No se registraron nuevas muertes.