Cada vez son más pesadas las sanciones que se le están aplicando al régimen, dice el doctor Williams Dávila, presidente de la Comisión de Política Exterior de la Asamblea Nacional.
Las anunciadas contra el presidente del Tribunal Supremo de Justicia, Maikel Moreno, son el resultado del segundo informe de la alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, que es más fuerte que el primero, porque infiere la destrucción de las instituciones.
Y las últimas sobre los hermanos Santiago y Ricardo Morón Hernández, presuntos testaferros de Nicolás Maduro y su hijo, golpean porque constituye una acusación por presuntos delitos cometidos por el usurpador en diferentes partes del mundo.
El régimen de Maduro ha hecho con Irán una simbiosis de sobrevivencia, porque ambos están sancionados por los Estados Unidos. En nuestro país aterrizan vacíos los aviones de Mahan Air y despegan cargados de oro, dijo.
Se ha sostenido el régimen, además, con apoyo de Rusia, China y Turquía, pero la situación del régimen empeora porque las sanciones se producen a raíz de investigaciones que se están haciendo en todas partes, las cuales demuestran que este es un Estado forajido.